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Colau recuerda que ampliar el Camp Nou exige cambiar el plan urbanístico

El Gobierno municipal dice que la reforma necesita consenso vecinal y político

Carlos Orquín
Recreación virtual del futuro Camp Nou facilitada por el Barça.
Recreación virtual del futuro Camp Nou facilitada por el Barça.

El Espai Barça, el futuro complejo deportivo que incluye el nuevo Camp Nou presentado ayer por el Fútbol Club Barcelona, no deberá ser una barrera urbanística para los residentes del distrito de Les Corts. Este es el deseo del Ejecutivo de Ada Colau, alcaldesa de la ciudad, que conversa con el club y los vecinos sobre la reforma. Cualquier modificación, avisa el Gobierno municipal, exige una modificación del plan urbanístico además de un gran consenso vecinal y político, lo que supone un trámite largo. Las asociaciones colindantes esperan que el proyecto no contemple la proliferación de oficinas ni de aparcamientos, algo que el club asegura que cumplirá a rajatabla.

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El departamento de Urbanismo asegura que mantiene relaciones “fluidas” con el club, pero recuerda que el proyecto necesitará de una modificación del plan general metropolitano. “Es un trámite de largo recorrido que tendrá que iniciar el Ayuntamiento y que requerirá meses”, reconocen fuentes municipales. La gran mayoría del suelo está calificado como equipamiento salvo un pequeño trozo del Miniestadi, que cuenta actualmente como zona verde. El proceso supone pasar por estudios técnicos y por el pleno, donde Colau no tiene asegurada aún la mayoría. El Barça quiere empezar las obras en el verano de 2017 pero el Ayuntamiento no pone fecha al proceso. 

Después de las quejas de los vecinos a los anteriores planes del club, el actual Gobierno municipal procura que la remodelación no sea un cheque en blanco para el Barça. “Nosotros tenemos que garantizar la compatibilidad del proyecto con los equipamientos del barrio necesarios. Hay que establecer una nueva relación del club con su entorno para que el recinto no sea una barrera, sino que se integre y adecue a la trama urbana de Les Corts”, explica Urbanismo.

Fuentes del Barça cuentan que el cambio de Ejecutivo obligó a retomar las posiciones de cada parte en la mesa de negociación, pero no explica si el Ayuntamiento ha cambiado de opinión sobre el proyecto después del relevo del Gobierno anterior de Xavier Trias. El primer encuentro fue a nivel político entre Colau y el presidente del club, Josep Maria Bartomeu, pero luego han seguido reuniones de equipos técnicos con presencia de vecinos.

El recinto del Espai Barça comprende unas 20 hectáreas en uno de los distritos más ricos 
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El conjunto del recinto comprende unas 20 hectáreas en uno de los distritos más ricos de la ciudad. La remodelación contempla: Por un lado, un palacio multifuncional con capacidad para 10.000 espectadores en competiciones deportivas —el nuevo Palau Blaugrana presentado hace una semana—. Por otro, una pista auxiliar con capacidad para 2.000 espectadores, y una pista de hielo complementaria. El miniestadi se derribará y se trasladará a la ciudad deportiva en Sant Joan Despí. En su lugar, el proyecto prevé hacer oficinas para el club y una zona comercial. Además, un aparcamiento subterráneo de 5.000 plazas junto con el remate de la operación, que es la reforma del Camp Nou para ampliar su capacidad hasta las 105.000 localidades y de la que se encargará el estudio de arquitectura japonés, Nikken Sekkei, en colaboración con Joan Pascual y Ramon Ausió Arquitectes, tal y como anunció ayer el club.

Los vecinos  de Les Corts temen que proliferen oficinas y aparcamientos y el club lo descarta

Los vecinos, además de quejarse de vandalismo durante los partidos, limpieza y seguridad, siempre han temido que en la reforma se cuele una recalificación encubierta. El proyecto está valorado en 600 millones de euros. El club prevé captar 200 poniéndole el apellido de una marca al Camp Nou, otros 200 de un crédito bancario y el resto lo justifica con el aumento de “recursos ordinarios”. Aquí es donde se despierta la alerta. Una de las formas más comunes para financiar operaciones urbanísticas ha sido la recalificación del terreno para construir oficinas o viviendas. Pero las mismas fuentes del club aseguran que ese extremo está fuera de todos los planes previstos actualmente. “En anteriores versiones del proyecto se contemplaban hasta 1.500 viviendas pero se tiró para atrás con el objetivo de no perder patrimonio”, explican.

Adela Argelet, coordinadora de asociaciones de vecinos de Les Corts, da confianza al Barça y explica que aunque observan con lupa el proyecto, las relaciones son buenas. “Eso sí, el acceso tiene que ser en transporte público, en eso también vamos a estar vigilantes”, añade. Otra de sus líneas rojas, explica, es el aparcamiento. “Si se amplían las plazas se produce un efecto llamada que queremos evitar”, dice. El club, por su parte, explica que las plazas previstas en el plan son “prácticamente” las mismas que existen ahora en superficie. 

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Sobre la firma

Carlos Orquín
Periodista especializado en política, trabajó en la redacción de Barcelona de EL PAÍS y, después, en diferentes proyectos de televisión -en La Sexta, TV3, La2-, y radio en SER Catalunya. Actualmente, concentrado en la comunicación institucional y política, lo que compagina con comer a tiempo completo y escribir a tiempo parcial en El Comidista.

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