Las averías de Rodalies afectan a más de 1,5 millones de pasajeros al año

El goteo de incidencias en Rodalies acabó afectando a más de 1,52 millones de pasajeros el pasado año, según unas estadísticas facilitadas por la operadora Renfe a la Generalitat, titular del servicio. Tan solo se contabilizan los problemas que comportaron más de quince minutos de retrasos que, entre octubre de 2014 y septiembre de 2015, alcanzaron los 388 casos. Los resultados de ese periodo fueron mejores que los de un año antes, cuando la afectación superó los 1,64 millones de pasajeros.

Fuentes del Departamento de Territorio destacaron, no obstante, que el número de afectaciones por los robos de cable no es tan alto como argumenta Adif. La empresa estatal encargada de la infraestructura ferroviaria asegura que ese es el principal motivo del gran número de incidentes que se registra en la red de corta distancia de Renfe. Según sus datos, entre el 15% y el 20% de los problemas tienen su origen en el corte de un cable, y culpa de ello a la falta de esmero de los Mossos d'Esquadra para controlar la red ferroviaria estatal.

La Generalitat reduce esa cifra a un 6% del total de las incidencias y a un 16% en lo que respecta a pasajeros afectados. En los dos últimos años, 480.000 usuarios habrían sido víctimas de averías originadas en robos. Las mismas fuentes de la consejería pusieron en duda las medidas de seguridad aplicadas por Adif para evitar los continuos robos. La compañía presidida por Gonzalo Ferre asegura que solo el año pasado interpuso casi 400 denuncias por robos en sus instalaciones, más que en el resto de España.

Según los datos de los dos últimos años, el 52% de las incidencias se debieron a problemas en la red ferroviaria, es decir, responsabilidad de Adif. La señalización, con 254 problemas contabilizados, es el primer elemento afectado por ese tipo de averías. De Renfe fueron responsabilidad el 29% de las averías, básicamente trenes estropeados. Y el resto corresponde a otras restricciones de la circulación, como son los atropellos o las obras.

La alta incidencia en la infraestructura es el motivo esgrimido por el Gobierno catalán para reclamar el traspaso de corredores ferroviarios de Adif en Cataluña, después de que la Generalitat ya asumiera la gestión del servicio, que presta a través de Renfe.