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El turismo hace el agosto en Fin de Año al llenar los hoteles de Barcelona

Los alojamientos de la ciudad registran una ocupación del 95% hasta el domingo

Lluís Pellicer
Las cuatro columnas de Puig i Cadafalch, en el Piromusical de La Mercè.
Las cuatro columnas de Puig i Cadafalch, en el Piromusical de La Mercè.Gianluca Battista

Barcelona se ha consolidado como un destino turístico de Fin de Año. Y la prueba es que los alojamientos turísticos, en especial hoteles y apartamentos, viven lo que queda de semana como si fuera el fin de semana de un mes de agosto, en plena temporada alta. Casi todos los establecimientos, según las patronales del sector, han colgado ya el cartel de completo. A ello han contribuido el inusual clima de este año, el espectáculo de Fin de Año y la oferta cultural de la ciudad. Además, las estancias serán más largas porque la Nochevieja cae en jueves, lo que permite aprovechar todo el fin de semana. Este año abundan sobre todo los turistas europeos, en especial los procedentes de Francia, Reino Unido y los países nórdicos.

Los alojamientos de Barcelona rozarán a partir de hoy el lleno. Según el gremio sectorial, las reservas indican que esta noche y prácticamente todo el fin de semana la ocupación será de entre el 95% y el 96%. Fuentes del sector explican que los buenos resultados del puente de la Purísima ya hacían augurar una elevada contratación para Navidad, pero finalmente esta ha superado las previsiones. La ocupación, dicen estas fuentes, es similar a la de un fin de semana de agosto, cuando la capital catalana se pone hasta los topes.

Este año ha habido tres factores que han contribuido al lleno. El inusual clima que vive la ciudad la ha hecho más atractiva para las reservas de última hora y ha supuesto que algunos turistas hayan desistido de ir a la montaña. El calendario ha querido, además, que la Nochevieja haya caído en jueves, por lo que los hoteles están viendo cómo tienen reservas más largas. Y en tercer lugar, el sector cree que Barcelona se ha consolidado como un destino de Fin de Año.

“Hace unos años que los turistas preguntaban porque no sabían qué hacer o dónde ir a celebrar la llegada del Año Nuevo durante la Nochevieja. El espectáculo de Fin de Año de la plaza de Espanya ha venido muy bien y es otro atractivo para la ciudad”, explica el presidente de la Asociación de Apartamentos Turísticos de Barcelona (Apartur), Enrique Alcántara. Tras la segunda edición, el Hombre del Milenio —que este año ha sido sustituido por un reloj virtual proyectado a las columnas de Puig i Cadafalch— apareció en varios medios extranjeros.

Los apartamentos turísticos, de igual modo, están prácticamente a tope. Alcántara explica que la ocupación es del 95%, lo cual equivale a llenar todas las plazas. “En ocasiones queda una noche vacía que acaba quedando sin contratar porque no compensa”, sostiene el presidente de Apartur.

Según la entidad, este Fin de Año predomina el turismo europeo, en especial de Francia, Reino Unido y los países nórdicos, después de que durante el puente de la Purísima la ciudad estuviera tomada sobre todo por italianos y turistas del resto de España. Alcántara, además, pide al Ayuntamiento que tome nota de lo que suceda estos días: “La ciudad estará a tope y no se colapsará como en verano, cuando se satura por los viajeros que se alojan en hoteles de la costa”, advierte.

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La quinta ciudad favorita para Nochevieja

Barcelona es la quinta ciudad del mundo preferida para los usuarios de la plataforma Airbnb. En concreto, 24.000 usuarios han elegido la capital catalana para Fin de Año, solo por detrás de Nueva York (47.000), París (45.000), Londres (35.000) y Sydney (25.000) y por delante de Berlín, Tokyo, Ámsterdam, Roma y Miami, según el portal. Barcelona ocupa la tercera posición en la clasificación europea, en la que Madrid es novena y Lisboa décima.

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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