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Societat Civil Catalana advierte del plan de Mas para “destruir” el Estado

La entidad manda una carta a 150 empresarios y embajadores sobre la oferta de JxSí a la CUP

Rafael Arenas, presidente de Societat Civil Catalana.
Rafael Arenas, presidente de Societat Civil Catalana.Gianluca Battista

Societat Civil Catalana (SCC) ha enviado una carta a 150 empresarios, embajadores y opinadores en el que advierte del “plan detallado para desintegrar el Estado” que supone la propuesta que Junts pel Sí (JxSí) ha hecho a la CUP. La misiva, firmada por el presidente de SCC Rafael Arenas, expresa la “preocupación” de la organización por el documento con el que la coalición formada por CDC y ERC trata de conseguir el apoyo de la formación anticapitalista para la investidura de Artur Mas como presidente de la Generalitat al entender que este “desobedece explícitamente al Tribunal Constitucional” y supone un uso de los poderes públicos “para la destrucción del Estado”.

La carta lleva adjunto el documento que JxSí ha entregado a la CUP, en el que SCC ha subrayado los párrafos a su juicio más graves. Todos ellos se refieren a los apartados sobre la “hoja de ruta” hacia la independencia y la previsión sobre el desarrollo del “proceso constituyente”. En cambio, SCC no ha enmendado ninguna de las medidas contempladas dentro del plan de choque social que JxSí ha entregado a la CUP y que las entidades sociales ya han calificado de “insuficiente” tanto por su contenido como por la dotación presupuestaria, de 270 millones de euros.

SCC advierte en la carta de que el plan independentista contempla la creación de embajadas, una hacienda catalana y la transferencia de funcionarios, entre otras cuestiones. “Incluso, aunque la CUP rechace el acuerdo, consideramos extraordinariamente grave que el grupo mayoritario en el Parlamento de Cataluña, en el que se integra el actual presidente de la Generalitat, haya elaborado un texto que desobedece explícitamente al Tribunal Constitucional y plantea la utilización de los poderes públicos para la destrucción del Estado”, sostiene el documento.

La organización asegura estar “preocupada”, por último, por la situación política en Cataluña. “El desafío secesionista es muestra, a nuestro juicio, de que todos debemos colaborar para conseguir la estabilidad y el progreso de nuestro país”, remacha la carta.

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