El gran comercio exhibe sus ventas para evitar el cierre en festivos

Las grandes superficies han exhibido la potencia de sus ventas este viernes, horas después de que el Ayuntamiento de Valencia mantuviera su idea de limitar fuertemente la libertad horaria en la ciudad. Un plan que prevé revocar la apertura en festivo, por ejemplo, en la calle Colón, con el argumento de asegurar la conciliación de la vida familiar y la protección del pequeño comercio y el empleo que este genera.

El Ayuntamiento ha convocado una última reunión el 29 de diciembre con el objetivo de alcanzar una solución de consenso.

La asociación que agrupa a las grandes superficies, Anged, ha indicado que en las dos primeras semanas de Navidad "las ventas han crecido una media del 8% con respecto al año pasado". Y ha pronosticado una gran afluencia de clientes a las grandes superficies este domingo, día también de elecciones generales, que cae poco antes del día de Navidad.

"El consumidor valenciano demanda seguir avanzando en el futuro por la vía de la comodidad en su compra, como está demostrando en esta campaña navideña. Cada vez que abrimos en festivo el público responde. Además, este año se nota un grado mayor de optimismo en el consumidor que ha recuperado los volúmenes de consumo del año 2006", ha señalado Anged a través de su portavoz en la Comunidad Valenciana, Antonio López-Pena.

La reunión mantenida el jueves en el Consejo Local del Comercio terminó sin acuerdo. El Ayuntamiento ha planteado que de las cinco zonas que ahora tienen libertad horaria en la ciudad, y que coinciden con aquellas en las que existen grandes superficies, se pase solo a una. Un kilómetro cuadrado, el mínimo que establece la ley aprobada esta legislatura por el Gobierno y que exige la declaración en ciudades como Valencia de al menos una Zona de Gran Afluencia Turística, en torno a la Lonja.

En el área grafiada por el Consistorio que dirige Joan Ribó no hay grandes superficies. Se ubican, en cambio, pequeños comercios que en cualquier caso ya pueden abrir los días que consideren.

El concejal de Comercio, Carlos Galiana, presentó en la reunión 21.000 firmas de trabajadores presentadas en la última semana en el Ayuntamiento pidiendo que se dé marcha atrás en la liberalización horaria. Galiana leyó en la reunión la carta de una familia en la que los padres no pueden coincidir con sus hijos los fines de semana como ejemplo de la dificultad para conciliar la vida personal y laboral en el sector con la actual regulación, aprobada por el anterior Gobierno local.