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Un vicepresidente del Barça pagó 580.000 euros a Jordi Pujol hijo

El empresario Carles Vilarrubí se desmarca de las transferencias del primogénito desde Andorra a un hotel del Pirineo

Jesús García Bueno

Carles Vilarrubí, empresario y vicepresidente del Barça, pagó más de 580.000 euros a dos empresas de Jordi Pujol Ferrusola entre 2004 y 2012, según un auto de la Audiencia Nacional al que ha tenido acceso EL PAÍS. Vilarrubí evitó aclarar ayer, en su declaración como imputado por blanqueo de capitales en el caso Pujol, por qué ordenó esos pagos. Hace un año, cuando declaró como testigo ante el juez, no reconoció la existencia de esas facturas —contabilizadas por la Agencia Tributaria— y lo mismo hizo en su comparecencia ante el Parlamento catalán.

CVC Consejeros —un holding de inversiones patrimoniales presidido por Vilarrubí— abonó 330.600 euros a Iniciatives Marketing Inversions y otros 251.652 euros a Project Marketing hasta hace tres años, según el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata. Las dos empresas que recibieron los fondos están controladas por el primogénito del expresidente catalán y su exmujer, Mercè Gironès. Según fuentes del caso, los pagos están relacionados con el traspaso de pólizas de seguros de una correduría controlada por Vilarrubí. El empresario catalán, de 61 años, optó por no detallar la naturaleza de esos pagos, si bien es cierto que ni el juez ni la fiscal le preguntaron por ellos.

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Hace un año, Vilarrubí declaró como testigo y admitió que pagó 20.000 euros a Júnior para que buscara “terrenos entre Lleida y Girona” para unas instalaciones hípicas. Pese a que, tras “diez meses” de trabajo, el primogénito no dio con los terrenos, cobró. “Le dijimos que nos pasara una factura y pagamos”, declaró el empresario en junio de este año, en su comparecencia ante la comisión de investigación del Parlamento autónomo por el caso Pujol.

La fiscal ya mencionó el abono de los 330.600 euros hace un año, pero Vilarrubí no pudo justificar la factura. Y en el Parlament, negó su existencia. “Se lo aclaro. Ninguna factura de 300.000 y pico euros (...) Alguien de los juzgados me dijo que se había equivocado de persona”, respondió a los diputados Oriol Amorós (ERC) y Jordi Terrades (PSC). En esa misma sesión detalló su relación con Jordi Pujol Ferrusola —“él jugaba a rugby en el Barça y yo, a hockey”— y afirmó que la relación entre ambos “no es en absoluto intensa”.

Al padre, Jordi Pujol Soley, le conoce de “antes de ser presidente” de la Generalitat, de “la juventud de Convergència”: Vilarrubí llevaba a Pujol por Cataluña en un Seat 127. Después, ocupó cargos en la Administración —fue responsable de las emisoras de la Generalitat y director de Juegos y Apuestas—, aunque ha desarrollado la mayor parte de su carrera en el sector privado. Casado con Sol Daurella —presidenta de la embotelladora de Coca-Cola en España—, Vilarrubí es también vicepresidente en España de la banca de inversión Rothschild, miembro de diversos consejos de administración (como el de ONO) y vicepresidente del área de relaciones internacionales e institucionales del FC Barcelona.

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La Policía pidió papeles a la nueva novia de ‘Júnior’

JESÚS GARCÍA

Los registros del 27 de octubre no solo afectaron a viviendas y empresas de la familia Pujol. La Policía también se presentó, por orden del juez, en la casa barcelonesa de una joven de apellido alemán. “Se ha constatado”, señala la policía, “que al menos desde septiembre de 2014 [Jordi Pujol Ferrusola] podría haber estado pernoctando ocasionalmente” allí. Los agentes solo pasaron una hora en el piso de la nueva novia de Júnior y, tras inspeccionar un ordenador y los armarios, salieron sin nada.

El interrogatorio de ayer, de apenas una hora, se centró en un traspaso de 50 millones de pesetas (300.000 euros) que Jordi Pujol Ferrusola hizo en 1995 a la empresa Restaurante Cerdanya desde una cuenta en Andorra. Defendido por el penalista Emilio Zegrí, Vilarrubí negó haber recibido ese dinero y subrayó su “escasísima vinculación” con la empresa, que regenta un restaurante y el hotel Torre del Remei (un palacete modernista) en el Pirineo catalán. El empresario admitió que invirtió en el negocio junto a un grupo de amigos (poseía el 4% de las acciones) y que fue consejero (sin capacidad ejecutiva) desde 1993 y durante cinco años. Vilarrubí declaró ante el juez José de la Mata que ignoraba el ingreso porque la actividad de la Torre del Remei estaban en manos del chef Josep Maria Boix y de su mujer, ya fallecida. Vilarrubí se ratificó en su declaración como testigo y negó haber poseído cuentas en Andorra.

Según fuentes de la defensa, los 50 millones fueron el “contraaval” de un préstamo que la Banca Reig de Andorra hizo a Restaurante Cerdanya. Pujol acudió en auxilio del hotel, que atravesaba problemas económicos.

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Sobre la firma

Jesús García Bueno
Periodista especializado en información judicial. Ha desarrollado su carrera en la redacción de Barcelona, donde ha cubierto escándalos de corrupción y el procés. Licenciado por la UAB, ha sido profesor universitario. Ha colaborado en el programa 'Salvados' y como investigador en el documental '800 metros' de Netflix, sobre los atentados del 17-A.

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