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Una sentencia ‘encarcela’ a 300 vacas en Lleida

Un juez impide el acceso de camiones por el camino que había utilizado la explotación ganadera desde hace más de un siglo

Alfonso L. Congostrina
Un Pifarré alimentaba ayer a las vacas con paja que tenía en las cámaras.
Un Pifarré alimentaba ayer a las vacas con paja que tenía en las cámaras.Javi Martín

El futuro de una granja de 300 terneros de Lleida ha quedado en suspenso después de que el 31 de octubre de 2014 el juez del Juzgado de Instrucción número 3 de Lleida sentenciara que el camino que servía de acceso a la explotación ganadera quedaba anulado. La decisión judicial resolvía que el acceso es una propiedad privada y por tanto los dueños de la granja Pifarré no podían utilizarlo. Los ganaderos recurrieron la sentencia ante la Audiencia de Lleida —que todavía no se ha pronunciado— y los camiones que introducían y sacaban terneros y pienso dos veces por semana siguieron transitando por el acceso.

El propietario del polémico camino, llamado Serra de Canyelles, es la sociedad Plagar y Serveis Social S. L. cuyo administrador es José Luis Plaza, el alcalde de Barbens (Pla d'Urgell), junto a su familia. El pasado 10 de septiembre Plaza ordenó colocar unas placas de hormigón en el acceso e instalar unas puertas que impedían el tránsito de camiones a la granja. Desde entonces ha comenzado una verdadera lucha por la supervivencia de la explotación Pifarré.

Joan Pifarré asegura que existe una fotografía aérea de 1945 en la que se ve el camino: “Un acceso que se ha utilizado en la granja durante más de cien años”. Daniel Plaza, el letrado de la sociedad propietaria del camino y, a la vez, hijo del alcalde de Barbens afirma que la sentencia judicial es clara: “La granja no tiene derecho de paso por nuestra propiedad, ni derecho a servitud forzosa, ya que tiene otro camino que da paso a su explotación, un acceso propiedad de Adif”. Plaza justifica que pusieron puertas a su finca tras sufrir diversos robos.

Pifarré no cree en la vía alternativa de acceso, ya que “el camino de Adif es de tierra, no es apto para vehículos de gran tonelaje y, además, si un camión se accidenta allí puede provocar un corte en la línea del AVE en el mejor de los casos”. Plaza es de otro parecer, cree que el camino de Adif es útil y que 20 días después de que el juez les dictara sentencia “el Ayuntamiento de Lleida instaló dos señales que prohíben el paso de los vehículos de 15 toneladas sólo en el tramo del camino de Adif que afecta a la ganadería”. El letrado asegura que el Consistorio colocó estas señales en un camino “que no es de su propiedad y la ganadería se apoya en esta señalización para asegurar que no pueden trabajar”.

Los Pifarré con el camino Serra de Canyelles cortado por la familia Plaza y sin reconocer el acceso de Adif lanzaron un SOS a la población leridana. El pasado 18 de septiembre 500 personas hicieron una cadena humana y cubo a cubo consiguieron llenar de pienso los depósitos de la granja. Víveres que, apenas, duraron unos días.

El departamento de Agricultura de la Generalitat emitió un informe en el que calificaba de “critica” la situación de la granja y concluía con un “es urgente que se devuelvan las condiciones que garanticen el tránsito de camiones para el suministro de pienso a los animales de la explotación y la retirada de cadáveres”.

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Terneros malnutridos

El Ayuntamiento de Lleida negoció con los Plaza para que permitiera de forma transitoria el acceso de camiones una vez por semana durante tres horas. “Un insulto a nuestro trabajo”, critica Joan Pifarré. Daniel Plaza asegura que ha autorizado el acceso a camiones “con animales vivos o muertos pero no cargados de pienso o de paja porque estos pueden ir, no tan cargados, por el camino de Adif”.

Las dos veces que los Pifarré han intentado pasar por el camino de los Plaza, la última fue ayer, se les ha impedido pasar por ir cargados de pienso. El pasado 25 de septiembre los Plaza sí que permitieron que los Pifarre sacaran 52 terneros de la explotación. “Habían perdido peso y no se podían recuperar para su explotación”, lamentaba Pifarré. La solución está ahora en manos de la Audiencia de Lleida que será la que fijará el uso del camino de Serra de Canyelles.

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