_
_
_
_
_

Los vecinos del edificio desplomado recogerán “lo que quede” en 15 días

Una concejal espera que solo se puedan salvar documentos identificativos y algo de ropa

Diego Fonseca Rodríguez
Un vecino sale con sus enseres del edificio colindante al inmueble desplomado en Carabanchel.
Un vecino sale con sus enseres del edificio colindante al inmueble desplomado en Carabanchel.S. S.

Después de que este martes se terminase de derribar la parte de la fachada que quedaba en pie del edificio que se desplomó el lunes en Carabanchel, los inquilinos podrán recuperar "lo que quede" de sus enseres en 15 días, según ha declarado Esther Gómez, concejal del distrito de Carabanchel. Los escombros del inmueble serán transportados a un solar cercano en los próximos días y a partir de ahí los servicios de vivienda del Ayuntamiento se encargarán de recuperar lo posible —sobre todo documentación y quizá algo de ropa— para trasladarlo al colegio Antonio Machado, donde los vecinos podrán recoger sus pertenencias.

Más información
El edificio desplomado pasó la inspección en 2012
El derrumbe del edifico se produjo por el colapso de un pilar
In English: Residential building collapses in Madrid neighborhood of Carabanchel

Con un juego de ropa y un par de zapatos, Juan Pérez, un inquilino de 80 años de la primera planta del edificio desplomado, pasó la noche en casa de su hija. A Pérez, que tiene a la mujer enferma y el trabajo de toda su vida deshecho en los escombros del piso que compró hace 50 años, le falta el aparato de la boca que necesita para comer y la llave de su coche, que tiene aparcado en un garaje cercano. "En la casa también se han quedado las joyas, el vestido de boda de mi esposa, mis trajes de trabajo… toda mi vida", recopila.

Como el resto de vecinos del inmueble número 5 de la calle de Duquesa de Tamames, Pérez intentará recuperar en la escuela Antonio Machado lo que queda de sus enseres. "Después de una vida de trabajo, me veo sin nada", dice. Después del derrumbe, que acabó este martes, la concejala del distrito de Carabanchel y Latina, Esther Gómez, ya ha avisado de que las probabilidades no son esperanzadoras: "Evidentemente, va a ser imposible salvar muebles. Esperemos que puedan recoger su documentación y a ver si también es posible algo de ropa".

Dinero y ropa interior

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, que se reunió el lunes con los inquilinos, dijo este martes que se están destinando aportaciones económicas para que puedan comprar los productos de necesidades más urgentes. “Estamos buscando una manera de que tengan estas prestaciones de cumplimiento de las necesidades más inmediatas, como el abono transporte o la ropa interior; todo lo que precisen”, ha señalado la alcaldesa.

Carmena ha asegurado que el Ayuntamiento “ha cuidado más que nunca a los que son víctima de una catástrofe de estas características”.

Aunque Pérez durmió en una habitación en casa de su hija, muchos vecinos pasaron la noche del lunes en el hotel NH de la ribera del Manzanares. 42 vecinos, del total de 57 desalojados —entre el edificio desplomado y el inmueble colindante—, durmieron en las habitaciones de la cadena hotelera. "De momento, la solución provisional va a ser el hotel. Estamos hablando con cada familia para buscar soluciones individuales, pero aún es muy pronto. Nosotros lo que hemos garantizado es que nadie se va a quedar en la calle hasta que se solucione la situación", ha dicho Gómez.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

15 profesionales de los servicios sociales —entre trabajadores sociales del distrito de Carabanchel y miembros del SAMUR— se han reunido este martes con los familiares para tratarlos y aconsejarlos. "Mi hijo mayor [de nueve años] está tocado psicológicamente. Le ha costado mucho dormir y se ha despertado cada dos por tres. Por una parte tiene miedo de volver y por la otra no sabe adónde vamos a ir", dice Sebastián Muñoz, de 30 años. Muñoz, que vive en el edificio colindante desde 2010, pasará todas las noches en el hotel con su mujer y sus tres hijos hasta que puedan volver a su piso: "Los pequeños [de seis y dos años] no se enteran de tanto, pero mi mujer también está muy mal".

Miedo al seguro

Después de la reunión que han mantenido este martes los vecinos con varios técnicos del Ayuntamiento y la concejala Esther Gómez, los inquilinos se han visto con la administradora del edificio para tratar la cobertura del seguro. "La aseguradora [Santa Lucía], en principio, no cubrirá nada porque no estaba incluido el derrumbe en la cobertura", ha dicho una vecina que prefiere guardar el anonimato. La administradora del inmueble no ha querido hablar con este periódico.

El derrumbe de la propiedad se produjo por el colapso de uno de los pilares, según explicó el lunes José Manuel Calvo, concejal de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento. El edificio había pasado la Inspección Técnica de Edificios (ITE) en 2012.

En mayo una familia que habitaba en el segundo alertó a la administradora de una grieta descomunal que cruzaba una pared en diagonal, pero un arquitecto retrasó a septiembre la reparación del inmueble. En la madrugada del lunes, los pilares, del año 1964, cedieron. 40 viviendas —incluido el inmueble colindante— fueron desalojadas.

"Nos fuimos solo con la ropa que llevábamos encima"

Los 21 vecinos del edificio número 7 de la calle de Duquesa de Tamames (Carabanchel), el inmueble contiguo al que se derrumbó el lunes, han regresado este martes por unos minutos a sus casas. Los inquilinos, que también habían sido desalojados por temor a que sus viviendas se viesen afectadas por el derrumbiento del edificio número 5, han entrado en sus hogares acompañados de miembros de la policía local y de bomberos del Ayuntamiento de Madrid para recoger los enseres más necesarios.

En la madrugada del lunes, muchos salieron solo con lo que llevaban puesto. Uno a uno fueron han entrado este martes por orden —primero los del primer piso, después los del segundo, etc.— y han recogido las cosas que necesitan para continuar en el hotel NH de la ribera del Manzanares en el que se alojan desde la noche del lunes. "Menos mal que hemos podido venir. El lunes no nos dio tiempo a coger nada y el niño solo llevaba un juego de pañales. Nosotros nos fuimos solo con la ropa que nos pusimos a correr con las prisas", cuenta Sebastián Muñoz, de 30 años y padre de tres niños.

Los técnicos del Ayuntamiento madrileño han trasladado a las familias del edificio número 7 que el inmueble no reviste daños estructurales y que los inquilinos podrán volver a sus hogares. "Si todo sale como tenemos previsto, en un plazo de una semana los inquilinos estarán otra vez en sus casas. Ayer se apuntaló el edificio y no hay ningún problema", ha señalado Esther Gómez, concejal del distrito de Carabanchel.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Diego Fonseca Rodríguez
Es redactor en la sección de Deportes de EL PAÍS, en donde ha estado en otras secciones. Antes trabajó en Efe, Cadena SER, ABC y Faro de Vigo. Es licenciado en Periodismo por la USC, Máster en Periodismo Multimedia por la Universidad Complutense y Máster de Periodismo EL PAÍS. En 2021 obtuvo el Premio Lilí Álvarez de Periodismo.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_