_
_
_
_
_
Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

Los silencios del pujolismo

El ‘caso Pujol’ es un fenómeno raro. Contrasta la escasa literatura que ha suscitado con el alud de libros sobre el proceso soberanista

Lluís Bassets

No sé cuántos libros han aparecido alrededor del proceso soberanista. Es imposible contarlos y menos todavía leerlos. Se cuentan en centenas en poco más de cinco años. Sí sé cuántos libros han aparecido sobre el caso Pujol desde que se produjo la confesión, hace ahora exactamente un año: ocho, de los cuales dos son reediciones.

Lo sé muy bien porque yo soy el autor de uno de ellos, titulado La Gran Vergonya. Ascens i caiguda del mite de Jordi Pujol (Columna), que empecé a escribir en los mismos días en que el ex presidente confesaba sus pecados.

Yo solo fui el primero de los cuatro periodistas, digo bien cuatro, vinculados de una forma u otra con el diario EL PAÍS, que hemos publicado libros sobre Pujol en este año posterior a la confesión. Pere Ríos, periodista de larga experiencia judicial y ahora en la información política, ha publicado su Banca catalana: caso abierto (Península). Maiol Roger, joven reportero político en elpais.cat y muy activo en las redes sociales, ha publicado Jordi Pujol. La gran família (Angle). Y Margarita Rivière, columnista asidua de estas páginas, perteneciente a mi generación, que falleció el pasado 29 de marzo, justo dos días después de la presentación de su fábula moral sobre el pujolismo, la novela Clave K (Icària), escrita hace 20 años pero rechazada por los editores entonces por aprensión ante el poder de Pujol.

Cuatro sobre ocho es una proporción extraña. Como es lógico, no hubo coordinación entre los cuatro autores, aunque puede que exista alguna explicación ante tanta coincidencia. Si algún periódico se ha llevado la fama de antipujolista, sobre todo en la época más difícil, la inicial, este es EL PAÍS. Si alguien puede presentarse como excepción a la paradoja de los silencios sobre la corrupción pujolista —si todos lo sabían, ¿por qué nadie lo contaba?— son los periodistas de este periódico.

Nosotros lo contamos, o contamos lo que estuvo en nuestra mano en los años 80, y luego hemos seguido contándolo siempre que hemos podido

Nosotros lo contamos, o contamos lo que estuvo en nuestra mano en los años 80, y luego hemos seguido contándolo siempre que hemos podido. Todas las generaciones que conforman el mundo complejo de este periódico están representadas en los cuatro libros que el lector tiene a su disposición. El más joven, Roger, nos ofrece el friso de los caracteres individuales y de las historias personales que conforman el mundo pujoliano. Ríos, con la ayuda de los fiscales Mena y Villarejo, recupera el caso Banca Catalana, realmente fundacional en el asentamiento del poder pujolista. Rivière nos ofrece, con la técnica del roman à clef, una espléndida explicación sobre los mecanismos del poder pujolista tras la primera mayoría absoluta de 1984. Habría que añadir todavía un libro pionero y fundamental, que tuvo muchas dificultades para aparecer y nunca ha sido reeditado, como es Banca Catalana. Más que un banco, más que una crisis (Plaza Janés), de Francesc Baiges, Jaume Reixach y Enric González, este último también entonces periodista de EL PAÍS.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Veamos cuáles son los otros libros que acompañan este año a los salidos de la factoría periodística paisista. Dos de ellos, como ya he dicho, son reediciones con algún añadido o adaptación a las nuevas circunstancias. Se trata de Ara sí que toca. Jordi Pujol, el pujolisme i els successors (Edicions 62) de Francesc-Marc Àlvaro de 2003 y de Jordi Pujol: en nom de Catalunya (Debate) de Fèlix Martínez y Jordi Oliveres de 2005, libros de referencia sobre el pujolismo anterior a la caída, y que he utilizado en el mío, entre otras cosas para documentar hasta qué punto se conocían los negocios turbios de los hijos de Pujol muchos años antes de la confesión.

Quedan dos libros más. De una parte, está el del novelista Toni Sala El cas Pujol. Reflexions sobre el terreny (L'Altra), galardonado con los premios Ciutat de Barcelona y Premio de la Crítica, un dietario literario con las reflexiones que le sugiere la peripecia del expresidente en los días posteriores a la confesión. Y de la otra, el volumen de entrevistas realizadas por Roser Pros-Roca con prólogo del propio Jordi Pujol a veinte amigos del ex presidente, bajo el título de Jordi Pujol. Del relat al silenci. Vint testimonis de primera mà (Gregal).

Cuatro de ocho, dos de los cuales son reediciones, un séptimo un dietario y un octavo una contribución a la rehabilitación. Todo esto es muy raro y sin correspondencia con la envergadura del personaje y la trascendencia histórica de la confesión, ni tampoco con las consecuencias políticas de la caída de los Pujol y su desaparición de Convergència. Yo mismo, y creo que mis compañeros de EL PAÍS, hubiéramos preferido algo más de compañía y competencia y menos soledad y silencios.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Lluís Bassets
Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_