El Supremo dice que el explosivo de Alfon era para “causar la muerte”
Los jueces sostienen que las intenciones del joven "no eran pacíficas"
El Tribunal Supremo considera que el explosivo que llevaba en la mochila Alfonso Fernández Ortega, Alfon, durante la huelga general del 14 de noviembre de 2012 “estaba destinado a causar graves lesiones e incluso la muerte de una o varias personas que se encontrasen cerca en el momento de la explosión”. Así lo expresan los magistrados de la Sala II en la sentencia que argumenta los motivos por los que el alto tribunal confirmó la condena a cuatro años de prisión impuesta por la Audiencia de Madrid por tenencia ilícita de explosivos.
Durante el juicio, Alfon aseguró que él no llevaba la mochila con explosivos y que fueron unos agentes de policía los que la colocaron junto a él. Los jueces, sin embargo, consideran probado que el joven, que ahora tiene 24 años, fue detenido “in fraganti” y que las declaraciones de los agentes que participaron en la detención “no ofrece lugar a dudas”. “Cualquiera que fuese la protesta en la que pretendía participar el recurrente, es claro que sus intenciones no eran pacíficas”, por lo que la tenencia de un artefacto explosivo tan peligroso justifica “una reacción penal contundente”, afirma el Supremo.
Alfon fue detenido el jueves por la noche, después de que se conociera el fallo del alto tribunal, e ingresó el viernes en la prisión de Soto del Real.