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Martínez-Sampere deja el escaño del PSC: “No me siento útil”

La diputada mantendrá la militancia y descarta dar el salto a otro partido

Rocío Martínez-Sampere, este miércoles, en el Parlament
Rocío Martínez-Sampere, este miércoles, en el ParlamentAlbert Garcia

La diputada del PSC Rocío Martínez-Sampere (Barcelona, 1974) abandona el Parlament después de casi nueve años y tres legislaturas. “No me siento útil representando mi escaño y no creo que esté defendiendo los intereses de los votantes socialistas”, explicó a EL PAÍS la diputada, en contraposición a Carme Chacón, exministra de Defensa y que tras estar retirada un año en Miami ha regresado a la política catalana para encabezar la lista del PSC por Barcelona en las elecciones generales.

Martínez-Sampere comunicará su renuncia en el Pleno de este jueves, aunque este jueves ya lo ha anunciado al grupo parlamentario del PSC y el pasado martes lo hizo saber al primer secretario del partido, Miquel Iceta.

“Mis desacuerdos con la dirección son conocidos y si no me he ido antes ha sido para no perjudicar al partido”, apostilló la todavía diputada. “En este grupo parlamentario no tengo papel que hacer”.

Economista de formación, Martínez-Sampere ha acabado como portavoz de Educación del PSC al ser desplazada desde el inicio de esta legislatura por Maurici Lucena, portavoz del grupo parlamentario y cabeza visible en temas económicos.

La diputada asegura que ha querido provocar “el menor ruido posible” y explica que si hubiera dimitido antes de las elecciones del 24 de mayo ese habría malinterpretado la marcha y eso es lo que he querido evitar”, para no perjudicar candidato del PSC, Jaume Collboni.

A ambos les une una amistad desde hace años que se enfrió con motivo de las elecciones primarias para elegir al alcaldable por Barcelona. Collboni se impuso por 500 votos sobre la actual concejal del PSC, Carmen Andrés, y Martínez-Sampere obtuvo el peor resultado de los cinco aspirantes. A aquellos comicios internos se presentaron también Laia Bonet, ahora directora de relaciones institucionales de la empresa Aigües Ter-Llobregat, y Jordi Martí, que abandonó el PSC para integrarse en MES y ha acabado de gerente del Ayuntamiento de Barcelona con Ada Colau.

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Rocío Martínez asegura que a partir de ahora se dará un tiempo para reorganizar su futuro profesional. “No tengo ningún papel firmado”, explica, y descarta utilizar las puertas giratorias de la política. Sí tiene claro que seguirá militando en el PSC y que descarta dar el salto a otro partido o movimiento, como han hecho otros diputados disidentes, como Joan Ignasi Elena, que fundó Avancem y han acabado pactando en las elecciones municipales con Esquerra Republicana en diversos municipios.

Martínez-Sampere fue uno de los cinco diputados díscolos que rompieron la disciplina de voto al inicio de la legislatura, con motivo de la declaración soberanista. Desde entonces, su distanciamiento con la dirección por este y otras cuestiones de fondo y estrategia política han sido continuos.

Aunque el PSC solo logró 14 diputados por Barcelona en las últimas autonómicas, el sustituto de Martínez-Sampere es el número 22 de la lista, a causa de las continuas bajas que se han producido en la legislatura. Se trata de Teo Romero, que está imputado por malversación cuando fue vicepresidente del Fondo Catalán de Cooperación al Desarrollo por sus viajes como alcalde de Santa Margarida de Montbui.

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