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Cerrada una residencia de mayores en Paterna por desatender a los internos

La Policía imputa a la responsable del centro privado, a la que encontró ebria, por malos tratos. En la instalación, que se clausuró en 2002 tras un incendio, había seis internos

Agencias
Valencia -

La Consejería de Bienestar Social de la Generalitat valenciana ha acordado la suspensión cautelar de actividad de la residencia de la tercera edad de la localidad de Paterna, de gestión privada, cuya responsable fue imputada este miércoles por desatención de los seis ancianos allí internados, y ha iniciado un expediente sancionador.

Así lo han confirmado a EFE fuentes de este departamento, que han incidido en que personal del servicio de Inspección de Centros de la Consejería se ha trasladado durante la mañana del jueves al centro.

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La Consejería, en coordinación con el Ayuntamiento de Paterna y del Cuerpo Nacional de Policía, se ha puesto a disposición de las familias para facilitar el traslado de los usuarios a otros centros residenciales.

Esta misma residencia fue cerrada en 2002 a raíz de sufrir un incendio porque carecía de la autorización de apertura, aunque las mismas fuentes han señalado que al año siguiente se le concedió y abrió de nuevo las instalaciones.

La alcaldesa de Paterna, Elena Martínez, ha explicado que la mujer imputada era responsable de la residencia desde el pasado diciembre y, aunque anteriormente se habían registrado algunas quejas, desde su llegada estas habían aumentado. Algunos familiares habían denunciado que no funcionaba la caldera o que no tenían pañales, aunque no se trataba de ningún problema estructural.

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"Nos consta que los inspectores de la Consejería habían resuelto estas quejas pero lo que nos encontramos ayer no lo esperábamos", ha reconocido Martínez, quien ha defendido que se actuó "rápidamente".

La alcaldesa ha relatado que todo surgió tras la denuncia de un familiar que fue a visitar a su madre y vio que los residentes estaban desatendidos, por lo que llamó a la Policía y al 112, a la vez que la concejala tenía conocimiento de la situación.

El consistorio desplegó sus propios servicios sociales porque, según la alcaldesa, "lo que más nos preocupaba eran los ancianos -en ese momento había seis internos- y que estuvieran atendidos".

"Al final solo hubo que desviar un anciano al hospital Arnau de Vilanova y el resto se fueron a otras residencias o a casa de familiares" mientras la policía se encargaba de la responsable de la residencia, ha indicado. Según Martínez, cuando se personó en la residencia, la responsable "no estaba en las mejores condiciones para atender a los pacientes" y ha asegurado que la policía le confirmó que "estaba bebida".

Fuentes del Cuerpo Nacional de Policía han indicado que la responsable de la residencia, tras prestar declaración en comisaría, está en situación de imputada no detenida y será el juez el que determine qué pasa con ella después de que remitir a las autoridades judiciales el atestado que están llevando a cabo sobre el caso.

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