Sánchez plantea una reforma fiscal “para quienes nunca fueron austeros”

"No nos abandones, ¡eh!", le dijo una ilicitana al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, tras el mitin que ofreció ayer por la tarde en Elche y al que asistieron varios centenares de personas. Sonriente, con tono didáctico, en la víspera del día del trabajador, Sánchez acudió ayer en uno de los mejores lugares para encontrar el perfil del trabajador que más está sufriendo la crisis: la mujer.

El secretario general de los socialistas se plantó con su autobús de campaña en un barrio obrero como el de Carrús y en una ciudad que, salvo por los últimos cuatro años, ha sido socialista desde sus orígenes democráticos. En Elche, tierra del calzado español, el sector industrial se ha cebado con las aparadoras, mujeres que trabajan en semiclandestinidad, cosiendo suelas en talleres ilegales sin cotización alguna en muchos casos.

A ellas se había dirigido también por la mañana en Alicante, donde mantuvo un encuentro con una veintena de empresarias junto al candidato local, Gabriel Echávarri, y el secretario general del PSPV y candidato autonómico, Ximo Puig. En esa reunión, aprovechó para lanzar varias ideas para la mujer profesional: un mínimo del 40% de los consejos de administración habrá de ser femenino e impulsará una ley que equipare los salarios entre hombres y mujeres (los de ellas son un 24% inferior).

Sánchez no dio puntada sin hilo en su discurso. En el sur de Alicante, paraíso de la economía sumergida, se encuentran cinco de las ciudades que menos renta por persona declaran, siendo Elche la más grande. Sánchez habló de "los 10 millones de horas extras ilegales" que se hacen en España semanalmente, de sueldos que han caído a cifras "de hace 25 años" y llamó al fin de la austeridad en esta ciudad donde la gente ha vuelto a los talleres ilegales del calzado y al campo. También celebró que el Tribunal Constitucional haya admitido a trámite el recurso contra el decreto de copago en los servicios sociales para discapacitados y mayores, recurrido por los socialistas valencianos.

"Nuestra reforma fiscal será para quienes nunca han sido austeros", exclamó en un encuentro en el que se notó un apoyo popular muy superior al que tuvo, por ejemplo, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, durante la campaña europea. "Preparaos para recuperar Elche y Valencia", exclamó Sánchez.

La minigira valenciana que comenzó ayer el jefe de los socialistas termina hoy en Valencia, donde asistirá a la manifestación del Primero de Mayo. Será la primera vez que un secretario general del PSOE celebre la fiesta del trabajador fuera de Madrid.