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“Trabajé con Rato, pero ahora actúo como ministro”, dice De Guindos

El titular de Economía asegura que el Gobierno "no interfirió lo más mínimo" en la investigación al ex director gerente del FMI

San Sebastián -
Luis de Guindos, hoy en San Sebastián durante el primer encuentro del Foro Empresarial de Gipuzkoa.
Luis de Guindos, hoy en San Sebastián durante el primer encuentro del Foro Empresarial de Gipuzkoa.Javier Etxezarreta (Efe) (EFE)

El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha reconocido que "haber trabajado ocho años" con Rodrigo Rato "es un aspecto secundario" porque en sus decisiones actúa "como ministro". Así lo ha asegurado el titular de Economía y Competitividad durante el coloquio posterior a su conferencia en la apertura del Foro Empresarial de Gipuzkoa, celebrado esta mañana en la Cámara de Comercio de San Sebastián. "Es una cuestión mía que no tiene que afectar, por supuesto, en la actuación como ministro de Economía", ha añadido

Ha sido su primera referencia concreta a la actuación seguida por el Gobierno central tras la polémica detención y posterior puesta en libertad del exvicepresidente segundo, y en la que ha precisado que "nunca ha dado instrucción alguna". Sin hacer referencia directa a Rato, De Guindos ha asegurado: "Por supuesto, todos los contribuyentes son exactamente iguales ante la ley independientemente de sus antecedentes y consecuentes". Lo demuestra, defendió el exministro, la actuación independiente del Ejecutivo ante posibles casos de corrupción.

De Guindos también ha aludido esta mañana al proceso de saneamiento de las cajas de ahorro. Así, ha recordado que el Gobierno sólo dio una instrucción al FROB, consistente en que cada vez que identifique "un comportamiento potencialmente irregular se ponga en conocimiento de la Fiscalía".

De hecho, ha admitido que el caso de "las tarjetas black salió porque el FROB lo puso en conocimiento de la Fiscalía" tras ser informado por Bankia. "Sabía perfectamente el impacto que este asunto iba a tener socialmente", pero el ministro de Economía ha asegurado que "no interfirió nunca lo más mínimo" porque eso es precisamente "calidad de las instituciones democráticas".

En este contexto, De Guindos ha asegurado que "España no es un país estructuralmente corrupto en absoluto" y advirtió que aunque ha habido "casos muy notables" y "deleznables que causan desánimo en la opinión pública", no se puede "generalizar".

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