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Hologramas contra la “ley mordaza”

Una manifestación con tintes futuristas, organizada por No Somos Delito, reúne virtualmente frente al Congreso a 2.000 personas de todo el mundo

Holograma de la manifestación, anoche frente al Congreso de los Diputados, convocada por la plataforma No Somos Delito.
Holograma de la manifestación, anoche frente al Congreso de los Diputados, convocada por la plataforma No Somos Delito. KIKE PARA

Quién le iba a decir a Kate Moss que acabaría inspirando una manifestación en Madrid. El desfile de la modelo británica en París en 2005, convertida en holograma por el diseñador Alexander McQueen, ha servido de fuente de inspiración a la concentración de manifestantes virtuales que se celebró anoche en la capital, frente al Congreso de los Diputados. Convocada por la plataforma No Somos Delito, la concentración mostró su rechazo a la Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana, aprobada por el Gobierno del Partido Popular y bautizada por la oposición como “ley mordaza”.

La manifestación permitió ver, de 21.30 a 22.30, más de 2.000 imágenes virtuales enviadas durante las últimas dos semanas por personas desde todos los rincones del mundo (Rusia, México, Alemania...) y que la organización almacenó en Hologramasporlalibertad.org. Los manifestantes no estuvieron físicamente en Madrid, aunque su versión holográfica pudo verse en la plaza de las Cortes; un lugar “céntrico y cargado de simbolismo político” que los organizadores no revelaron hasta la hora del evento. Allí se proyectaron rostros y proclamas escaneados en contra de la norma, que entrará en vigor el próximo 1 de julio y que, según la plataforma, “es un grave retroceso democrático, al limitar derechos fundamentales de expresión y reunión”. Durante casi una hora, los manifestantes en 3D alzaron su voz frente al Congreso con gritos como: “Pienso, luego soy delito” o “Les da igual que vivas en la calle, pero no quieren que te expreses en la calle”.

Cumpliendo con la reforma del Código Penal, que se basa en la contestada Ley de Seguridad Ciudadana, aprobada el pasado 26 de marzo, los organizadores evitaron convocar a personas físicas en el entorno de la Cámara. La norma tiene un amplio rechazo social: el 82% de los españoles pide su modificación o retirada, según una encuesta de Metroscopia para la ONG Avaaz.org. “A partir de ahora, la única forma de manifestarse en España será a través de hologramas”, comenta Carlos Escaño, portavoz de la plataforma No Somos Delitos, en la que conviven SOS Racismo, Yayoflautas y Greenpeace, entre más de cien organizaciones. “El articulado es atroz. Un indigente podrá ser multado con 600 euros por ‘deslucir la vía pública’, si duerme en la calle”, afirma preocupado. Considera la ley una amenaza para asambleas políticas en la calle, las protestas ecologistas o las movilizaciones antidesahucios. Para todas estas manifestaciones se contemplan multas de entre 6.000 y 30.000 euros. En caso de falta de comunicación a las autoridades, la cuantía puede ascender a 600.000 euros.

“Apagar la protesta social desatada desde las movilizaciones del movimiento 15-M”. Para No Somos Delito, esa es la finalidad de la “ley mordaza”, aprobada en solitario por el PP. Y legalizar, además, las denominadas devoluciones en caliente de inmigrantes. También establece multas por no mostrar el DNI a agentes de seguridad o grabar imágenes de antidisturbios golpeando a manifestantes.

“Prohibir las manifestaciones ante un Parlamento constituye una restricción desproporcionada de la libertad de reunión; lo dice el relator especial de Naciones Unidas”, asevera Alba Villanueva, otra de las portavoces de la plataforma y para quien la manifestación con hologramas es la proyección de “un futuro surrealista en el que para manifestarnos tendremos que descarnarnos”. “No es cierto que la ciudadanía demande más seguridad. Según las encuestas de los organismos públicos, la inseguridad ciudadana ocupa el duodécimo puesto de las preocupaciones de los españoles, por detrás de la sanidad, la educación, el paro, la situación económica o la corrupción”, añade.

“Se trata de la primera manifestación de hologramas celebrada en el mundo, que ha contado con el apoyo de empresas de tecnología, comunicación y diseño”, cuentan desde la organización, sin revelar el origen de la financiación del evento, aunque reconocen haber recibido “fuertes aportaciones económicas”. El acto contó con la intervención tridimensional de portavoces de la plataforma en tiempo real, que destacaron que, de las más de 87.000 manifestaciones celebradas en España en los dos últimos años, solo se han producido incidentes en menos del 1% de ellas, según datos proporcionados por el propio Ministerio de Interior.

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Sobre la firma

Carlos Córdoba
Redactor jefe de Vídeo de EL PAÍS y profesor de Vídeo de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS. Desde hace más de 15 años se dedica al periodismo audiovisual. Anteriormente fue director, presentador, guionista, reportero y redactor de distintos programas en TVE, Atresmedia, Mediaset o Telemadrid, entre otras cadenas.

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