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Educación disminuye en 60 aulas de Infantil la red escolar pública

Persiste el ajuste educativo en en el curso 2015-16 aunque es menos duro que en años anteriores

Entrega de 14.000 firmas contra el cierre de una unidad en la escuela infantil La Milotxa.
Entrega de 14.000 firmas contra el cierre de una unidad en la escuela infantil La Milotxa.

La Consejería de Educación anunciaba el lunes que en el curso 2015-16 habrá 206 unidades educativas más en los colegios de Infantil y Primaria (CEIP) de la red pública valenciana. Sin embargo, el martes el Diari Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV) la desdecía. En él se podía comprobar que el número de unidades disponibles disminuye si se tiene la paciencia de contarlas en el “catálogo de unidades y puestos de trabajo docente” elaborado por la Generalitat para el próximo curso, lo que se conoce como “arreglo” o ajuste escolar. Este catálogo registra en Educación Infantil un saldo negativo, con 59 unidades (equivalente a grupos de alumnos o aulas) menos que el presente curso, resultante de restar las suprimidas de las creadas. En Primaria arroja un saldo ligeramente positivo de 12 unidades.

 La supresión “responde principalmente a la bajada de la natalidad” y por eso afecta más a Infantil, argüía Educación en su comunicado. A pesar de que se percibe consenso en que Educación ha suavizado la dureza del ajuste escolar respecto a cursos precedentes, en conjunto (Infantil y Primaria), el catálogo de unidades públicas se reduce de un curso para otro en 47 grupos.

¿Por qué tal diferencia entre el anuncio propagado por la consejería un día y las cifras del diario oficial del siguiente? Ambos datos se refieren a situaciones bien diferentes. La razón es que en el comunicado de la Generalitat se incluían, aunque no se especificara, las unidades que la Administración tiene previsto habilitar por un curso académico de forma temporal. Todos los años se habilitan esas unidades, en mayor o menor cantidad, que por algo no aparecen en el DOCV. “No las podemos considerar unidades nuevas”, remarcaba ayer FETE-UGT, y compararlas con las unidades de catálogo “se llama hacer trampas”. Desde el punto de vista laboral tampoco son lo mismo, señalaba Beatríu Carmona, portavoz del STEPV, porque “significa sustituir plantilla estable por provisional”.

De acuerdo con los datos del DOCV, en el saldo conjunto Castellón es la única provincia en que la relación entre aulas suprimidas y creadas da prácticamente cero. Pero, aun así, Educación Infantil tendrá el curso que viene nueve unidades menos que el presente en esta provincia. “Es lo más preocupante, porque las unidades de Infantil suprimidas son líneas que no se ofertarán en la matriculación para el curso que viene”, señalaba Laureà Puig, portavoz de FETE en Castellón. “En el caso de Infantil, supone el anticipo del cierre de colegios completos”, advertía ayer en un comunicado Miguel Soler, responsable socialista de Educación.

La eliminación progresiva de líneas educativas (etapas completas) hasta un posible cierre de centro se certifica en el colegio Ciutat de Cremona, de Alaquàs, que tras años de supresiones consecutivas, el próximo curso perderá tres grupos más de Infantil y, en consecuencia, cuatro maestros. “No se justifica ni con los datos de demanda ni con el baremo de admisión que prima a los nuevos alumnos con hermanos en el centro”, apunta Cardona. También se avanza en el cierre de líneas en los colegios Bonavista y Martínez Valls de Ontinyent, al que se suma el Vicente Gironés, con la eliminación ahora de un grupo de tres años. “Es falso que el arreglo escolar sea un mecanismo de adaptación de las unidades a la natalidad”, agregaba el portavoz del STEPV. “Es más bien un instrumento político para reducir la red pública respecto a la concertada en grandes poblaciones; también, este año, es un instrumento electoral”.

Valencia es un caso significativo. Es la ciudad que más acusa el ajuste: se suprimen 10 unidades de Infantil en otros tantos centros y no se crean en ninguno. Además, destaca FETE, el CEIP Tomás de Villarroya deja de impartir el primer ciclo de la ESO. Una tendencia que se acentúa en este ajuste es la supresión de unidades en la pequeña red de escuelas infantiles de las que es titular la Generalitat. Se elimina un grupo en la de Tavernes Blanques y otro en la de Puçol. En esta última, conocida como La Milotxa, es el segundo curso sucesivo en el que se recorta un aula. La dirección del centro, el AMPA y representantes de CC OO PV presentaron hace ocho días en la consejería 14.000 firmas contra el cierre de la unidad de tres años, reivindicación que respaldaba el Consejo Escolar Municipal.

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