_
_
_
_
_

El primer embajador de Podemos

Alberto Moreno, candidato en Majadahonda del partido de Iglesias, es diplomático, pero dice que es un “simple funcionario”

Alfonso L. Congostrina
Albert Moreno Humet, en su etapa como embajador.
Albert Moreno Humet, en su etapa como embajador. Fernando Galindo/ Diari d'Andorra

El que fuera, hasta el pasado verano, embajador de España en Andorra, Alberto Moreno Humet, es el candidato de Podemos, bajo la marca Candidatura Ciudadana, en Majadahonda. Así lo decidieron los 262 vecinos que participaron en las primarias celebradas a principios de mes. Moreno es, además secretario general en la localidad de la formación de Pablo Iglesias. Fue elegido con el 70% de apoyo de la militancia. De esta manera, el exembajador en Andorra entre 2011 y 2014, se convierte en el primer diplomático que logra un cargo orgánico en Podemos. De todas formas, la relación con el líder de la formación no siempre fue excelente, ya que Moreno formó parte de la candidatura de Pablo Echenique, el militante que perdió las elecciones a secretario general frente a Iglesias.

Más información
El paraíso terrenal del PP
Majadahonda se reactiva
Majadahonda, el inicio del fin

Moreno nació en Barcelona en 1954. Es licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona y diplomado en Relaciones Internacionales en París. Es un diplomático de carrera y ha tenido diferentes destinos internacionales en su vida profesional, entre ellos Angola y Luxemburgo. Entre 2004 y 2011 fue consejero de la promotora Glorias Diagonal. Además, fue subdirector de la Escuela Diplomática, asesor internacional del president de la Generalitat, el socialista José Montilla, secretario para la Unión Europea y delegado de la Generalitat en Bruselas.

A finales de septiembre de 2013, cuando todavía era embajador de Andorra, Moreno se mostró a favor de la consulta soberanista catalana siempre que “sea dentro de la legalidad y acordada con el Gobierno”. Pese a su posición favorable al referéndum de autodeterminación, el diplomático dejó claro que “la independencia no solucionará ninguno de los problemas que tienen los catalanes”. Moreno aseguró también que votaría en contra de la secesión pero aceptaría un resultado en el que hubiera una participación amplia y un 65% de votantes a favor de la independencia. Estas declaraciones supusieron que fuera cuestionado por el propio ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo.

Moreno se muestra reacio a hablar con la prensa cuando se le habla de “la casta” a la que se refieren sus compañeros de partido. Se ampara en las órdenes que le han dado desde Podemos. “Mi formación me tiene totalmente prohibido hacer cualquier tipo de declaraciones”. Y añade que su afiliación “responde únicamente” a su vida privada y que no tiene que dar “ningún tipo de explicaciones”. “Soy un simple funcionario y puedo tener la ideología que crea pertinente”. Aun así, el candidato entiende que a la gente le resulte extraño ser embajador y a la vez dirigente de Podemos.

En la web de la formación se avanza algo de su programa. Majadahonda “ha basado su crecimiento en un modelo de urbanización que, de manera poco ordenado, por no decir caótica, ha ido rodeando paulatinamente el centro de la población original. Las urbanizaciones [en una de ellas vive Moreno] son espacios cerrados, mayormente vallados. Los sucesivos gobiernos del PP han promocionado este tipo de crecimiento urbano y de pérdida de identidad. Hay que abrirlas”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_