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Detenido en Barcelona el exrector huido de una universidad colombiana

González Joves tenía una orden de detención por haber malversado presuntamente 300 millones de pesos

La Policía Nacional ha detenido en Barcelona al exrector de la Universidad de Pamplona (Colombia) Álvaro González Joves, refugiado en Barcelona tras huir de la justicia de su país, que le buscaba como presunto autor de un delito de malversación de 300 millones de pesos -unos 106.000 euros- de fondos públicos. Según ha informado la Policía Nacional, el exrector titulado en historia, que había sido anteriormente militar, vivía desde hacía aproximadamente un año y medio en la capital catalana. El fugitivo extremaba las medidas de autoprotección, entre las que incluía cambios continuos de domicilio y aportación de datos falsos en los documentos, lo que dificultó su localización.

González Joves tenía vigente una Orden Internacional de Búsqueda y Detención para Extradición por un presunto delito de malversación de 300.000.000 de pesos colombianos de fondos públicos en el año 2006, cuando ejercía su cargo de rector de la Universidad de Pamplona de Colombia, al que había accedido en 1998.

Según los agentes del Grupo 2º de Crimen Organizado de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Barcelona que practicaron la detención, el arresto se llevó a cabo la pasada semana en la vía pública tras una exhaustiva investigación dificultada por las trampas del rector.

Las autoridades de Colombia le buscaban porque le acusan de que en diciembre de 2006, cuando era rector de la universidad colombiana, suscribió un convenio administrativo con el gobernador del Departamento de Casanare por valor de 3.000 millones de pesos colombianos que debían ir destinados a la adquisición de material universitario y construcción de aulas.

De estos fondos recibidos, según la acusación, fueron presuntamente malversados 300 millones de pesos colombianos, que supuestamente el exrector destinó a otros fines diferentes a los establecidos en el convenio.

A principios de este año, la Policía Nacional recibió una Orden Internacional de Detención requisitoria a través de Interpol, expedida por las autoridades colombianas al existir indicios suficientes para deducir que el fugitivo podría estar residiendo en la ciudad de Barcelona.

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Tras ser detenido, Álvaro González fue puesto a disposición de la Audiencia Nacional, quien ordenó su ingreso en prisión a la espera de poder materializar su extradición a Colombia.

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