Maíllo: “Es IU quien puede construir un frente de izquierda”

El debate que planteó el miércoles Julio Anguita en su mitin de Málaga sobre si el papel de Izquierda Unida es el de ser vanguardia de un frente de izquierdas no es nuevo. El eco de esa intensa discusión se vivió hace meses en Córdoba, incluso antes de que cristalizase de otra manera en Madrid con la salida de Tania Sánchez. ¿Cómo converger con otras formaciones —Equo, Podemos, Ganemos— sin perder la vanguardia, las señas de identidad y las esencias de una formación que está a punto de cumplir 30 años? ¿Cómo tender la mano a otros partidos, tal y como reclamó Anguita, sin dejar de ser IU? Ayer en Córdoba, el coordinador general de la coalición en Andalucía y candidato a la presidencia de la Junta, hizo su propia lectura. Para Antonio Maíllo, las palabras de Anguita significan que “quien está en condiciones de construir un frente de izquierda es IU”.

Lo que Anguita dijo a simpatizantes y militantes en Málaga, que hay que buscar nuevas convergencias al margen del PSOE —socio de Gobierno durante tres años en la Junta—, ya se había oído muchas veces en Córdoba. Pero en esta ciudad no cuajó la iniciativa que parecía conciliar todas las aspiraciones de la izquierda: Ganemos Córdoba. Esta agrupación de electores, que trabaja para presentarse a las elecciones locales en la capital —aun tiene que recoger 5.000 avales—, surgió de un debate político impulsado por el propio Anguita.

En un principio, Izquierda Unida se mostró abierta a formar parte de ella, pero una de las decisiones votadas en asamblea fue inaceptable para IU. Ganemos Córdoba no sería una “sopa de siglas políticas”, no sería una coalición de partidos al uso. Izquierda Unida abandonó de esta forma un proyecto que su propio padre había ideado e impulsado.

Pero en Málaga Julio Anguita volvió a poner la cuestión encima de la mesa. “Esto no lo cambia una fuerza política sola (...) Apoyo una IU que se dirija a las demás formaciones políticas. Hoy pedimos cada uno el voto, pero esto pasa. Después de las elecciones, hay que tender la mano”, dijo. A nadie se le escapaba que hablaba de Equo, de Podemos (ambos integrados en una candidatura para el Parlamento andaluz) y de movimientos como Stop Desahucios o ATTAC.

Un dirigente de Syriza apoya como alternativa real al candidato de la federación

Maíllo no niega la existencia de una corriente alternativa de la que Izquierda Unida forme parte pero insistió en que el voto útil de la izquierda es el voto a Izquierda Unida. De esta forma, abogó por “la unión de fuerzas de izquierdas para cambiar este país y Andalucía”, pero subrayando que “el apoyo de este domingo” a su formación “es determinante para convertir en realidad las políticas de transformación en Andalucía y después en España”.

Una respuesta similar que podría resumirse en un primero votadnos a nosotros y luego hablamos, la ofreció el secretario de Organización de Podemos y jefe de campaña de las elecciones autonómicas, Sergio Pascual. “En Andalucía, como en España, hay una mayoría social ya construida que ha votado a muchos partidos diferentes en el pasado, pero que ahora tiene claro que hay que construir una nueva mayoría social”, dijo. “No se trata de construir frentes de ningún tipo, sino de que esa mayoría social se exprese el domingo, y que junte a los andaluces en general y no de un lado o de otro”, aseguró Pascual ayer en Sevilla.

De alguna forma, el mismo debate sobre el liderazgo de la izquierda ha cruzado el Mediterráneo hasta Grecia, donde gobierna Syriza. El partido de Alexis Tsipras recibió el efusivo apoyo tanto de IU como de Podemos. Y ayer le tocó responder a la incómoda pregunta de “a quién quiere más” a Stavros Karagkounis, asesor del primer ministro Tsipras y coordinador de Syriza en la región de Ática. El griego se había reunido en Córdoba con Maíllo para conocer alguna de las leyes que IU lleva en su programa. Preguntado directamente por si apoya a IU o a Podemos, Karagkounis sonrió y, señalando el eslogan de IU, afirmó: “Una imagen vale más que mil palabras”.

Además de apoyar al partido de Maíllo, Karagkounis añadió que espera “mucho de Andalucía y de España” y abogó por una alianza de la izquierda contra las políticas neoliberales de la Unión Europea. “Espero del pueblo andaluz que lance un mensaje fuerte de rechazo al bipartidismo tradicional, como ha hecho Grecia, país al que este mismo bipartidismo ha terminado arruinando”, concluyó.