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El IVAM reinterpreta las vanguardias históricas

El centro valenciano muestra 1.000 piezas del periodo 1914-1945, los años en que su colección es la mayor de Europa

Un móvil de Alexander Calder, al fondo, con una escultura de Jean Arp al lado, en la sala 'El misterio de las formas'.
Un móvil de Alexander Calder, al fondo, con una escultura de Jean Arp al lado, en la sala 'El misterio de las formas'.Mònica Torres

La exposición más relevante de la nueva época del IVAM bajo la dirección de José Miguel García Cortés abre este jueves sus puertas con casi 1.000 piezas de la colección del museo fechadas entre 1914 y 1945. Su título, Construyendo nuevos mundos. Las Vanguardias históricas en el IVAM recorre una parte clave del legado del museo valenciano, hasta tal punto que su director ha subrayado al presentarla que probablemente sea ésta "la mayor colección de cualquier museo europeo" por lo que respecta a este período histórico.

Es además, la primera vez que no se hace una lectura cronológica, sino temática, en la que caben diferentes criterios a la hora de asociar el material escogido. La lista de artistas incluidos en un recorrido que pasa por 10 salas del piso superior del museo es larga y deslumbrante. Hay obras de Marcel Duchamp, Kurt Schwitters, Alexander Calder, El Lissitzky, Moholy-Nagy, Naum Gabo, Geroge Grosz, John Heartfield, Josep Renau, Helios Gómez, Lászlo Peri o de Varvara Stepánova, por citar unos cuantos.

Siete de las 10 salas, organizadas temáticamente, incluyen breves proyecciones que contextualizan las esculturas, pinturas, collages expuestos con títulos como Un perro andaluz (Buñuel) en la bautizada como Cuerpos soñados; Tiempos modernos (Chaplin) en la dedicada a La fascinación por las máquinas, o El acorazado Potenkin (Eisenstein) en la última, titulada Experiencias Fragmentarias.

La sala organizada en torno a La transformación de la vida cotidiana, añade a las obras del IVAM, 40 piezas selectas de la colección Alfaro Hoffman, la mayoría electrodomésticos, junto a otras representativas de la Bauhaus. En la sala siguiente, presidida por el lema Utopía y revolución, suena la voz de Hitler en una radio de época en la que solo se podían seleccionar las emisoras que permitía el régimen, flanqueada por dos series de collages antinazis. Enfrente y a un lado, la espléndida colección de dibujos, en blanco y negro y color, de George Grosz, impresiona al verlas juntas por primera vez.

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