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Tres jóvenes de Gràcia denuncian las torturas sufridas de la Guardia Urbana

Una videodenuncia de un exsargento aseguraque fueron agredidos en los calabozos

Alfonso L. Congostrina
Rueda de prensa de Alerta Solidaria.
Rueda de prensa de Alerta Solidaria.ALBERT GARCIA

“Esperamos que los agentes de la Guardia Urbana rompan de una vez su silencio y denuncien a los compañeros que han torturado”, así de tajante ha reivindicado en la mañana de este sábado Martí Mayoral, portavoz del colectivo Alerta Solidaria, que el Ayuntamiento de Barcelona investigue sucesos como el 4F o las supuestas torturas denunciadas por tres jóvenes que fueron detenidos la noche del 9 de enero de 2005.

Este último suceso ha vuelto a salir a la luz después de que José Martínez Díaz, exsargento de la Guardia Urbana de Barcelona, hiciera público esta semana un vídeo en YouTube en el que denunciaba que el grupo de la Guardia Urbana de Barcelona denominado Unidad de Policía Administrativa y de Seguridad (UPAS) torturó a tres jóvenes detenidos en el barrio de Gràcia aquella noche. Según la denuncia del exagente, él se encontraba de fiesta la noche en que fueron arrestados pero al día siguiente un agente le comentó que un “policía de las UPAS había subido de los calabozos, de las dependencias de la Estación del Norte, y solicitó que se le proporcionara un cubo y una fregona para limpiar la sangre de algún detenido”. El exsargento asegura que comentó los hechos con el intendente del cuerpo , pero este le aseguró que si no había testigos no se investigaría el caso. Martínez Díaz, en su videodenuncia, sentencia que los agentes de las UPAS tienen una trayectoria de “violencia, malos tratos… y episodios muy oscuros en las dependencias municipales”.

Después del vídeo del exsargento jubilado, los tres jóvenes agredidos hace una década— Ramon Ortiz, Adrià Zayas y Daniel Vázquez— han realizado, junto con la Esquerra Independentista de Gràcia, una rueda de prensa en la plaza Vila de Gràcia donde han pedido al Ayuntamiento de Barcelona que investigue los hechos.

El abogado de los jóvenes, Jordi Busquets, ha realizado un pequeño resumen de los hechos. Los jóvenes fueron detenidos tras participar en una fiesta en el Casal Popular del barrio. Aquella noche, según los tres arrestados, hubo “persecuciones” por las calles de Gràcia. Según la denuncia de los tres jóvenes aquella detención se convirtió en un auténtico infierno. En el escrito se relatan diferentes puñetazos, patadas y humillaciones incluso aseguran que en la puerta de los calabozos había un cartel que rezaba: “Bienvenidos a la noche del terror”. Después de varias horas de supuestas torturas, los agentes municipales trasladaron a los jóvenes hasta la comisaría de la Policía Nacional en la plaza de Lesseps. Según aseguran, el comisario de la policía nacional al ver el estado de los tres sentenció: “Este marrón no me lo voy a comer yo” y ordenó que les realizaran otro reconocimiento médico.

El letrado ha explicado toda una tortuosa instrucción judicial en que los tres jóvenes acusaban a los urbanos de detención ilegal y delito de lesiones mientras que los agentes les acusaban de atentado a la autoridad y lesiones. La instrucción del caso fue muy dilatada, y al final, en junio de 2013 se archivó la causa al considerar que todos los delitos han quedado prescritos.

Uno de los jóvenes, Adrià Zayas, ha relatado, visiblemente afectado, las humillaciones a las que supuestamente fueron sometidos.

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El acto, que ha contado con la presencia de miembros de diversos colectivos entre los que se encontraba el diputado de la CUP, David Fernández, ha concluido con las reivindicaciones del colectivo Alerta Solidaria. Su portavoz, Martí Mayoral, ha pedido a los agentes de la Guardia Urbana que denuncien a los compañeros que hayan incurrido en este tipo de prácticas. Mayoral también ha criticado que el intendente Evelio Vázquez, actual responsable de la Guardia Urbana de Barcelona haya anunciado que se querellará contra el exagente que ha hecho público el vídeo dónde se alerta de las torturas. “La sangre está ensuciando la Guardia Urbana y exigimos una investigación pública y transparente de los casos de tortura”, ha concluido Mayoral.

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