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Sanitarios de Viladecans denuncian un “colapso brutal” en el hospital

Los empleados denuncian que el centro sanitario público sufre un déficit de personal

Jessica Mouzo

“Saturados y cansados” se mostraron ayer los trabajadores del hospital de Viladecans (Baix Llobregat) con la estampa que ofrecen desde hace unos días las urgencias del centro sanitario público —de referencia para unas 180.000 personas de la comarca—. Hasta una veintena de pacientes se agolpaban ayer al mediodía en camillas y sillas de ruedas por los pasillos de un servicio de urgencias que, según relataron los sanitarios, vivió el pasado fin de semana una situación de “colapso brutal” en la que incluso “llegó a faltar material para atender a los pacientes”. “Las habitaciones de urgencias, que antes eran individuales, ahora están ocupadas por dos enfermos”, denunció la presidenta de la junta de personal, Eliana López.

Un centenar de trabajadores se manifestó ayer a las puertas del hospital y pidió a la Generalitat recuperar el presupuesto de 2010 —que era de unos 40 millones de euros, frente a los 36 de 2014—. Los empleados denunciaron además el “déficit de personal” que sufre el centro y reclamaron más trabajadores para atender de forma adecuada la demanda de pacientes. “Hemos pedido que se contrate a unos 20 profesionales más de refuerzo, sobre todo para noches y fines de semana”, apuntó López.

Los sanitarios dudaron también de las promesas hechas hace unos meses por el consejero de Salud, Boi Ruiz, de no recortar más servicios y reclamaron de nuevo la necesidad de una unidad de cuidados intensivos.

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Sobre la firma

Jessica Mouzo
Jessica Mouzo es redactora de sanidad en EL PAÍS. Es licenciada en Periodismo por la Universidade de Santiago de Compostela y Máster de Periodismo BCN-NY de la Universitat de Barcelona.

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