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Ayuntamiento y Generalitat rechazan un museo militar en Barcelona

Cualquier cambio de uso u obras necesitaría el permiso del Ayuntamiento

Clara Blanchar
Sede del antiguo Gobierno Militar en Barcelona.
Sede del antiguo Gobierno Militar en Barcelona. TEJEDERAS

El Ayuntamiento de Barcelona rechazó ayer la idea del Ministerio de Defensa de volver a abrir un museo militar en la ciudad, en el edificio del Gobierno Militar, frente a Colón. “No es objetivo de ciudad ni un planteamiento que se haga en el Ayuntamiento”, indicaron fuentes del Consistorio. Las mismas fuentes precisaron que un equipamiento de este tipo “solo se podría entender desde el punto de vista de la divulgación de la acción humanitaria y de las misiones de paz”. “Un museo concebido en otro sentido no nos gustaría”, zanjaron y recordaron que un cambio de uso del inmueble o la realización de obras precisa de un permiso municipal. La Generalitat también rechazó la instalación, como ICV, ERC y la CUP.

El anuncio del futuro museo lo hizo el día de Reyes el teniente general inspector general del Ejército Ricardo Álvarez-Espejo, durante su discurso con motivo de la Pascua Militar.

El consejero de Empresa, Felip Puig, alertó de que abrir un museo militar “no es un deseo compartido” por la sociedad catalana, ya que esta “no tiene voluntad militarista”. Desde el Ayuntamiento, el presidente del Grupo Municipal de ICV, Ricard Gomà, se opuso ayer al proyecto. “El exhibicionismo armamentista no está en el ADN de nuestra ciudad”, dijo, y recordó que Barcelona se ha identificado con la cultura de paz y "el no a la Guerra".

El presidente del grupo municipal de ERC, Jordi Portabella, afirmó que la un museo militar “no forma parte de las prioridades de la ciudad”. Alfred Bosch, candidato a la alcaldía de los republicanos, pidió al Ministerio de Defensa que ceda a la ciudad los edificios del Gobierno Militar y de Capitanía, y sugirió que podrían albergar la biblioteca provincial. Son edificios que están “en la fachada más fotografiada y valorada de la ciudad”. También el líder de ICV, Joan Herrera, reivindicó la cesión de las instalaciones a la ciudad. El diputado de la CUP David Fernández rechazó el proyecto, recordó episodios como el bombardeo del general Espartero desde Montjuïc en 1842 o los de la Guerra Civil y lamentó que históricamente el Ejército haya ido “contra Cataluña”.

La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, reivindicó el anuncio de Álvarez-Espejo como una propuesta de su partido y lo consideró un anuncio “muy positivo”. Desde Ciutadans, su secretario general, Matías Alonso, que fue oficial del Cuerpo General de Armas del Ejército de Tierra durante dos décadas, avaló la propuesta porque, dijo, sería “patrimonio de todos”. Desde el PSC, su portavoz, Esther Niubó, consideró legítimo que el Ejército quiera instalar un museo militar en Barcelona. En cualquier caso, añadió que, puestos a descentralizar, lo prioritario acercar otras instituciones a los catalanes. En cambio, Jaume Collboni, candidato socialista a la alcaldía, contradijo a Niubó y mostró su oposición a la creación del museo.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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