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La firma que cobró los impuestos culpa a Miraflores de la deuda

El municipio, con una deuda de 3,8 millones, acumula 13.225 recibos sin reclamar

Esther Sánchez

La empresa que colaboró con el Ayuntamiento de Miraflores en el cobro de los impuestos (la UTE ATM-AGS) desde 2006 hasta el año pasado responsabiliza al Consistorio de la situación de insolvencia a la que el municipio ha llegado. La localidad de casi 6.000 habitantes acumula una deuda histórica en tributos no cobrados de 3,8 millones de euros, de los que se podrían reclamar “a priori” 2,3 millones, según el informe de CGI, la nueva firma contratada para colaborar con el Consistorio en la gestión recaudatoria. El Ayuntamiento, que gobierna el PSOE —la legislatura anterior lo hizo el PP— ha puesto en conocimiento del Tribunal de Cuentas los hechos para determinar si existe alguna responsabilidad por parte de ATM-AGS.

Víctor Ruesta, gerente de la UTE, sostiene que estos datos eran “conocidos por el Ayuntamiento, porque los tributos impagados figuran en el activo del balance que, con la Cuenta General, aprueban todos los años los concejales que componen el pleno de la corporación”. Al mismo tiempo, puntualiza que el pago voluntario de los tributos está en torno al 90% y en periodo ejecutivo, al año siguiente, se cobra otro 5%. ¿Entonces cómo se ha llegado a esta situación? “Por 10 años de desidia del propio Ayuntamiento a la hora de aprobar los expedientes y por falta de dotación de medios humanos”, responde.

Ruesta explica que la cifra procede de recibos erróneos pendientes de anulación por parte del Ayuntamiento. Pone como ejemplo el procedimiento que se sigue con un recibo de IBI a nombre de una persona fallecida. Se tramita un cambio de titular en Gerencia del Catastro, se genera una liquidación a nombre del titular correcto, se cobra y se anula el recibo erróneo. “Este último paso, y darlo de baja en cuentas, es lo que no se ha querido aprobar por los gobernantes y ha generado que el 90% de los 13.225 recibos sean papel mojado, de los que se pretende responsabilizar al contratista que ya no está”.

Fuentes municipales aseguran, sin embargo, que “puede existir algún error, pero lo que está claro es que si hubiera sido solo un problema de ese tipo el Ayuntamiento lo habría solucionado sin necesidad de acudir al Tribunal de Cuentas”. Desde IU están de acuerdo en que los gobiernos anteriores del PP y PSOE han mirado para otro lado y no han controlado las cuentas. “En cuanto a la empresa, si tiene algo que decir, debería hacerlo en el Tribunal de Cuentas”, declara Luis Miguel Martín, edil de IU. El Consistorio ya ha empezado a reclamar las cantidades pendientes.

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Sobre la firma

Esther Sánchez
Forma parte del equipo de Clima y Medio Ambiente y con anterioridad del suplemento Tierra. Está especializada en biodiversidad con especial preocupación por los conflictos que afectan a la naturaleza y al desarrollo sostenible. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y ha ejercido gran parte de su carrera profesional en EL PAÍS.

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