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Trabajos portuarios

Las 36 ‘neskatillas’ y empacadoras vizcaínas ya son profesionales

Las mujeres de Bermeo y Ondarroa reciben de manos del lehendakari su certificado

El País
Urkullu junto a la consejera Arantza Tapia y las 'neskatilla' y empacadoras.
Urkullu junto a la consejera Arantza Tapia y las 'neskatilla' y empacadoras.Fernando Domingo-Aldama

Al llegar a puertos, los marineros siempre eran por mujeres, pero no solo las esposas y novias de los tripulantes saludaban al atracar, también trabajadoras portuarias encargadas de las labores de tierras: desde tejer las redes hasta descargar o el empaque del pescado. 36 mujeres de Bermeo y Ondarroa mantienen vivo todavía dos de los oficios femeninos más antiguos de los puertos vascos: el de neskatilla y empacadoras. Todas ellas han recibido este lunes, por fin, un certificado de profesionalidad en Pescadería y elaboración de productos de la Pesca y Acuicultura en manos del lehendakari Iñigo Urkullu.

El colectivo de estas irreductibles mujeres, de entre 30 y 55 años, viven de un trabajo renumerado solo en función de la descarga, muy afectado también por la reconversión y los ciclos biológicos del mar. Las neskatillas eran tradicionalmente las que se dedicaban a descargar y limpiar el pescado de las capturas de la flota de bajura. Las empacadoras, a su vez, se ocupan de la clasificación de las capturas de la flota de arrastre, previa a su comercialización. Todas combinan su trabajo con tareas domésticas, e incluso con la gestión del barco familiar.

Recabar derechos profesionales ha sido una de sus tareas más complicadas. Las neskatillas de Bermeo se asociaron en 2009, mientras que la asociación de Ondarroa se creó cinco años antes, en 2004. Ambas comparten el objetivo de defender sus intereses y trabajar conjuntamente en su formación y protección laboral. Tienen pendiente todavía el reconocimiento de sus enfermedades profesionales. Hace casi un año, en enero de 2014, la UE reclamó para sus oficios los mismos derechos que para cualquier otro relacionado con la pesca.

Las rederas, el tercer gran colectivo de oficios femeninos tradicionales relacionadas con la pesca, ya recibieron en 2011 un reconocimiento similar al recibido hoy por neskatillas y empacadoras. Ha sido el Gobierno Vasco la institución que ha impulsado un proceso para que personas con experiencia laboral, pero sin estudios reglados, consigan este certificado de profesionalidad, y con reconocimiento oficial a nivel estatal.

"Durante años, habéis trabajado en la sombra, por lo que además del certificado profesional, merecéis este reconocimiento como reivindicación colectiva de vuestra profesión", ha manifestado el lehendakari.

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