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Una bronca por los alardes frustra el rechazo institucional en Gipuzkoa

El PSE retira un decálogo pactado con Bildu contra las agresiones a mujeres

25 de noviembre, día mundial contra la violencia machista. Ayuntamientos, parlamentos, gobiernos o cualquier institución protagonizan actos o emiten declaraciones oficiales para condenar las agresiones contra las mujeres y denunciar una lacra que en Euskadi, según datos de la Ertzaintza, sufren al menos 4.756 personas. Pero este 25 de noviembre, la imagen en una de las principales instituciones del País Vasco, las Juntas Generales de Gipuzkoa, fue este martes bien distinta y terminó en una bronca entre el PSE y Bildu con los alardes de Irún y Hondarribia como telón de fondo.

La cámara del territorio ni aprobó, ni emitió ningún comunicado contra la violencia sexista. El PSE, que había propuesto la aprobación de un decálogo para la erradicación de las agresiones contras las mujeres, retiró su iniciativa, provocando que para las Juntas, según defendió su presidenta, Loitzhune Txarola, el día señalado pasara de largo.

Las Juntas habían convocado la Comisión de Igualdad con un único punto del día, la votación de la iniciativa, una medida, sobre la que, en un principio, Bildu y PSE habían pactado una enmienda transaccional para que en un punto aparecieran referidas las “discriminaciones” que se viven en los alardes tradicionales de Irún y de Hondarribia. El texto no mencionaba los desfiles, pero sí hacía referencia a ambos municipios.

La juntera socialista Lore Suárez explicó a este periódico que se acordó la enmienda “in extremis, dos minutos antes” de que empezara la Comisión, después de que Bildu accediera a quitar una mención expresa a los alardes, pero que la imposibilidad de llegar a un acuerdo total con el resto de formaciones, de que el PNV pidiera que se votara punto por punto y no el documento en su conjunto —la formación tampoco suscribía la mención velada a las fiestas de Irún y de Hondarribia—, “viendo el ambiente que se estaba generando”, el hecho de señalar dos municipios cuando “en otros también se cometen actos discriminatorios”, y tras consultarlo con el partido —el PSE gobierna en Irún, el PNV, en Hondarribia—, la decisión final fue retirar su propia propuesta.

“Es decisión de la Mesa no expedir una declaración institucional si sobre el mismo tema se presenta una propuesta de resolución de cualquier comisión o viceversa”, explicó Txarola en un comunicado, justificando así por qué las Juntas no hicieron este martes  lo que el resto de instituciones vascas. Además, añadió Txarola: “Me parece vergonzoso y lamentable la falta de responsabilidad del grupo socialista para con la Comisión de Igualdad y sobre el crudo tema de la violencia machista”. “No quiero dejar sin mencionar que los alardes privados son la imagen más nítida, masiva y pública de la violencia contra las mujeres que vivimos en Gipuzkoa”, concluyó Txarola.

El resto de instituciones vascas salieron a la calle para censurar y denunciar una violencia que este año en Euskadi se ha cobrado una víctima mortal, Andina Reges Pereira de Brito, estrangulada por su expareja el pasado mes de marzo en Mungia. El Parlamento vasco lució en su fachada un punto lila, el emblema contra el maltrato, mientras que EH Bildu propuso la creación de una ponencia para el estudio de este “problema político de primer orden”.

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