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Víctimas y Derechos Humanos

Hernando despide y felicita al grupo de personas acogidas en Euskadi

La directora del departamento del Gobierno vasco se ha reunido con los extranjeros que regresan a su país, donde estaban amenazados, después de seis meses

El País
Hernando, al micrófono, junto a los acogidos y la directora en Euskadi de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado.
Hernando, al micrófono, junto a los acogidos y la directora en Euskadi de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado.DAVID AGUILAR (EFE)

El guatemalteco Jorge López Sologaistoa y las colombianas Luz Marina Palacios y Yolima Bedoya, amenazados en sus países por su defensa de los derechos humanos, regresarán a sus países, tras seis meses de acogida en Euskadi, con para seguir luchando allá donde fueron perseguidos. Los tres han sido seleccionados este año dentro del programa de Defensores de Derechos Humanos del Gobierno Vasco, y  de los tres se ha despedido este viernes en Vitoria la directora de Víctimas y Derechos Humanos, Monika Hernando, y la directora de CEAR en Euskadi, Patricia Bárcena.

El plan, en el que también participan la Comisión de Ayuda al Refugiado de Euskadi (CEAR), la Universidad del País Vasco y la Universidad de Deusto, tiene el fin de acoger anualmente, durante seis meses, a personas que sufren persecuciones o amenazas graves en sus países. Jorge López, Luz Marina Palacios y Yolima Bedoya volverán en diciembre a sus países.

Jorge López, de 53 años, es el director de Oasis, una organización guatemalteca que trabaja en defensa de la diversidad sexual, la lucha contra el VIH y la protección de personas explotadas sexualmente. Ha sufrido varios ataques y persecuciones. López ha asegurado que Guatemala continúa "en guerra" por la gran cantidad de asesinatos diarios que se producen y las persecuciones que sufren gays, lesbianas, bisexuales, transexuales y personas asexuales. "La orientación sexual e identidad de género son dos factores que sustentan los crímenes de odio".

Presentación del acto con las personas acogidas y Monika Hernando. / IREKIA

Luz Marina Palacios trabaja en la Asociación para el Desarrollo Social Integral del valle del Cauca de Colombia que defiende los derechos humanos de las comunidades campesinas e indígenas y, según ha señalado, las amenazas son "constantes" en la zona. Ha reconocido que su permanencia en el País Vasco le ha permitido descansar y "repensar" su acción.

Yolima Bedoya, de 26 años, a su vez, forma parte de la organización Corporación Social Nuevo Día de Medellín dedicada a defender a la población vulnerable a través de actos formativos y culturales. Ha relatado que ha sido amenazada. El programa le ha permitido "descansar, caminar por las calles sin mirar atrás".

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Este programa de acogimiento se desarrolla desde 2011 y cada se acoge a tres o cuatro personas. Cuando los refugiados vuelven a sus países se hace un seguimiento por parte del Gobierno Vasco, CEAR y Parlamento Vasco de su situación para que su "nivel de riesgo" disminuya y se informa también de sus casos a las embajadas españolas, ha explicado Monika Hernando.

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