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Los acusados de coaccionar a López al ir a votar lo reducen a un ‘rifirrafe’

El fiscal mantiene la imputación en la vista de su recurso contra la sentencia absolutoria

Bilbao -
Imagen de la vista por el recurso contra la absolución de condenados por coaccionar a Patxi López en una votación.
Imagen de la vista por el recurso contra la absolución de condenados por coaccionar a Patxi López en una votación.Miguel Toña (EFE)

El abogado de los cuatro jóvenes, a quien la Fiscalía considera responsables de haber acosado al que fuera entonces lehendakari Patxi López cuando iba a votar el 21 de octubre de 2012, ha pedido su absolución al considerar que no son los causantes del "rifirrafe" o de "la pequeñísima distorsión" registrada en el colegio electoral.

La sección primera de la Audiencia de Bizkaia ha celebrado este martes una vista ante el recurso del fiscal a la sentencia absolutoria a los cuatro jóvenes que había resuelto un juzgado de Bilbao.

Los hechos ocurrieron en las elecciones autonómicas de 2012, cuando Patxi López, que se presentaba a la reelección como lehendakari, acudió a votar y se encontró con un grupo de personas le estaba esperando en el interior del aula y que desplegaron pancartas en las que se leía "preso eta iheslariak etxera" (presos y huidos a casa).

En el juicio celebrado en abril López denunció que tuvo que realizar "un recorrido incómodo" para coger la papeleta y llevarla hasta la mesa electoral, porque escuchaba gritos justo a sus espaldas y observó "forcejeos" entre los escoltas que le acompañaban y quienes realizaban la reivindicación, en un aula de reducidas dimensiones.

La defensa considera que la absolución estaba ajustada a derecho

El Ministerio Público ha vuelto a reclamar la condena de cuatro de los protagonistas de esa reivindicación, tres hombres y una mujer, y que se les imponga una multa de más de 8.600 euros a cada uno por la comisión de un delito electoral, en concurso con un delito de coacciones.

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En este sentido, ha pedido a la Sala que atienda "a la gravedad" de los hechos considerados probados y que obligaron a la presidenta de la mesa electoral a tomar la decisión de suspender la votación y desalojar la sala. El fiscal ha estimado que se vulneró el derecho de sufragio de Patxi López, que "no es solo emitir un voto", sino hacerlo "en circunstancias de libertad".

El abogado de la defensa ha considerado que la resolución que absolvió a los cuatro jóvenes "estaba absolutamente ajustada a derecho" y ha reconocido que "se produjo un pequeño rifirrafe, pero que "de ninguna de las maneras supuso la vulneración de los principios" que recoge la ley.

Ha diferenciado entre la actuación de dos de sus patrocinados que ejercieron en esa jornada como apoderados de EH Bildu, G.A. y F.P., de la reivindicación con pancartas sobre los presos que llevaron I.L. y M.B. Según ha asegurado, los dos interventores actuaron a la llegada de López para hacer saber a la presidenta de la mesa que con el candidato habían accedido sus escoltas y los de su esposa que estaban armados, circunstancia que está prohibida expresamente en la Ley electoral.

De esa manera, "cuando G.A. y F.P. acceden al local no lo hacen para protestar por la situación de los presos vascos por razón de la dispersión", sino que "intentan dirigirse a la presidenta".

El abogado ha indicado que los otros dos acusados, I.L. y M.B., después de que entrara López al aula electoral, desplegaron sendas pancartas, pero no tuvieron intención de coaccionar al que fuera lehendakari, según han dicho los dos acusados cuando la presidenta de la Sala les ha dado la palabra al inicio de la vista.

"Cuando entra el señor Patxi López, pasa rozando a I.L., sin que éste haga nada para impedir su paso, ni le recrimine, ni le insulte, ni le amenace" y después, cuando el candidato "ya se dirige a votar, es cuando despliega la banderola junto a otras personas, entre las que se encontraba M.B.", según el relato del defensor.

Estos dos últimos acusados hicieron, según su letrado, "una acción de denuncia pacífica" y que, según se observa en el vídeo presentado como prueba, "el local es muy pequeño y había muchísima gente", entre apoderados, los escoltas compañeros de partido de López, las personas con los carteles de los presos y los periodistas, y que por ello, pudo producirse "una pequeñísima distorsión".

"Tanta gente en un mismo lugar" pudo generar "algún tipo de roce" por lo que la presidenta de mesa, "se pone nerviosa y opta por desalojar la sala", si bien cuando "el ambiente se tranquilizó", López pudo entrar y votar, ha asegurado. A su juicio, "no fue una alteración de la suficiente entidad" para ser tenido en cuenta penalmente y ninguno de los acusados fueron los causantes de aquel incidente.

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