Dimite el alcalde de Serranillos tras intentar sacar papeles del Consistorio

El alcalde de Serranillos del Valle (3.816 habitantes), Antonio Sánchez, imputado en la Operación Púnica, presentó ayer su dimisión tras ser sorprendido por la Guardia Civil intentando llevarse documentos de su despacho en el Ayuntamiento. Alertado por un funcionario, el juez de la Audiencia Nacional que investiga el caso, Eloy Velasco, ordenó a la Guardia Civil que requisara los papeles. Los agentes sorprendieron in fraganti al regidor, que aseguró que se trataba de documentación personal.

Una llamada telefónica desde el Ayuntamiento avisó de que Sánchez, de la formación independiente Unión Demócrata Madrileña (UDMA), se había presentado por la mañana en el Consistorio "con cajas vacías" que estaba "llenando con documentación de su despacho para posiblemente llevársela", según el auto redactado de urgencia por el juez.

Una patrulla de la Unidad contra el Crimen Organizado (UCO) se desplazó desde la localidad vecina de Griñón hasta Serranillos por orden del juez para verificar lo ocurrido y adoptar las medidas necesarias "para evitar la desaparición y destrucción de pruebas imprescindibles" para la investigación.

Sánchez, imputado por prevaricación, fraude, cohecho y malversación, presentó su renuncia ayer por la tarde en el registro del Ayuntamiento. Está citado esta mañana por el juez, que cotejará la documentación requisada y le devolverá la que sea estrictamente personal. Desde su detención el pasado lunes, el alcalde no había pasado todavía a disposición judicial al alegar problemas médicos.

El episodio de ayer se suma a la situación "de absoluta incertidumbre" que vive Serranillos desde la detención del alcalde, según Silvia Monterrubio, única concejal del PSOE, que rompió su pacto de gobierno con UDMA tras conocerse la presunta implicación de Sánchez en la red corrupta. "No he hablado con él ni tengo intención de hacerlo, pero lo que ha pasado esta mañana y lo que lleva pasando toda esta semana es una vergüenza. Llevamos desde entonces sin dar crédito", aseguró Monterrubio.

"Es lamentable", coincidió Olga Fernández, portavoz del PP en el municipio y alcaldesa hasta 2011. "No sé qué podía estar intentando, me he enterado por la prensa. El Ayuntamiento todavía no ha reaccionado ni ha dicho nada".

La oposición había pedido la dimisión de Sánchez cuando se conoció su arresto. Ayer también lo hizo su formación, que en un comunicado publicado en su página web exigió su renuncia "inmediata". Los otros cuatro ediles de UDMA en el municipio se desvincularon de los delitos que se imputan a Sánchez y explicaron que “mediante notificación remitida en los días pasados” le habían pedido también que entregara su acta de concejal. "La ausencia del alcalde y el abandono de sus funciones desde que tuvo lugar el registro municipal, sin motivo alguno que justifique su conducta, han producido gravísimos perjuicios al normal funcionamiento del Ayuntamiento, que están tratando de ser evitados por los concejales de este municipio", manifestaron en la nota, firmada por el portavoz de la formación en Serranillos, César López Ortega Gabriel.

El Consistorio, que ayer no quiso pronunciarse sobre el incidente protagonizado por el ya exalcalde, publicó una nota el pasado martes en la que aseguraba que los servicios municipales se estaban prestando con "total normalidad". Fernández lo desmintió: "No es cierto, nadie ha tomado las riendas. Ni siquiera se ha convocado un pleno para informar sobre qué está pasando. Hay una sensación de desamparo entre los vecinos".

En el municipio hay un segundo implicado, el técnico de medio ambiente Marco Durán, que quedó en libertad tras su declaración ante el juez.