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Más de 218.000 hogares valencianos están en situación de exclusión severa

El CEU, Cáritas y la Fundación Foessa publican un estudio sobre las consecuencias de la crisis

Hogares cada vez más cerca de la exclusión social, cada vez más alejados de quienes más tienen y donde el "efecto desánimo" ha llegado a hacer que dejen de buscar empleo es el panorama que dibuja el Observatorio sobre Pobreza y Exclusión en la Comunidad Valenciana, en su estudio "Análisis y perspectivas Comunitat Valenciana 2014. Crisis y derechos sociales". Las entidades que forman el observatorio, la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia, Cáritas de la Comunidad Valenciana y la Fundación FOESSA, han hecho pública la primera edición de un informe que nace con vocación de publicarse anualmente.

El estudio, realizado por los profesores de Economía y Empresa de la Cardenal Herrera, Enrique Lluch y Eduardo Esteve, relaciona los datos obtenidos de diversas fuentes oficiales y destaca que, en 2013, el 23,6% de los valencianos vivía en un hogar con una renta inferior al umbral de la pobreza (8.114 euros anuales para un hogar de una sola persona). La Comunidad Valenciana supera la media española en un 3% y es un 6,5% mayor que la media europea. La valenciana, según explica el informe, se posiciona como la sexta autonomía con mayor tasa de riesgo de pobreza.

Los autores del informe alertan de que "no sólo ha aumentado el número de personas en riesgo de pobreza, sino que las que son pobres lo son aún en mayor grado". Los investigadores han incidido en las cifras de pobreza infantil que han pasado, según sus datos, del 17 al 25% durante la crisis. Desde 2008 hasta 2013, la renta per cápita de los valencianos en términos nominales ha descendido un 11% y el Producto Interior Bruto autonómico per cápita ha bajado un 21% pasando de los 22.325 euros de 2007 a los 18.344 de 2013.

El estudio precisa los valores medios y asegura que el mayor efecto de la crisis se ha detectado entre la población con menores rentas, ahondando la brecha entre quienes más y menos tienen. El 25% de la población valenciana con menores ingresos ha pasado de disponer del 11% de la renta total en 2007 al 9,7% en 2013, es decir, su participación en la renta ha disminuido un 11,8%. Al mismo tiempo en el caso la población que en 2007 tenía mayor renta (el 25% de la población disponía del 43,14% de la renta total) ha aumentado un 5% la cantidad de dinero de la que dispone, alcanzando el 45,32% de la renta total.

Los investigadores, precisan que estas variaciones son, además, asimétricas ya que la caída de la renta de quienes menos tienen es muy superior al aumento de la renta de quienes tienen más. Desde el inicio de la crisis, según el informe, el número de personas con serias dificultades para llegar a fin de mes se ha duplicado, pasando del 10 al 20% en 2013.

El Observatorio de Investigación sobre Pobreza y Exclusión en la Comunidad Valencia asegura que, en materia de empleo, el "efecto desánimo" ha influido en la bajada de las cifras del paro en 2013 y 2014, por la existencia de un porcentaje de personas que han desistido de buscar empleo. Los autores precisan que estas personas han pasado de ser "desempleados a inactivos" siendo Alicante "la única de las tres provincias de la Comunidad donde los empleos creados en 2013 y la primera mitad de 2014 (28.500) superan la reducción de desempleados (15.400)". Las mejoras en las cifras de parados de Valencia y Castellón, según el estudio, se deben "al descenso de desempleados, bien por el citado "efecto desánimo", bien por el retorno de emigrantes sin trabajo a sus países de origen".

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La población que se está viendo más afectada por el desempleo es la de los jóvenes menores de 25 años donde el paro, "que estaba por debajo del 20% antes de la crisis, ha pasado en el segundo trimestre de 2014 a rondar el 60%". Según el informe, a esto se añade que la tasa de actividad ha caído a un 41,23%, lo que los investigadores interpretan como que "casi un 60% de los menores de 25 años ni tienen ni buscan ocupación remunerada". Los investigadores precisan que "más de la mitad de los que sí lo hacen, no encuentran trabajo en la Comunidad Valenciana", un escenario "peor que el de la media española".

En el estudio anual se incluye también un avance de los resultados de la próxima Encuesta sobre Integración y Necesidades Sociales 2013 de la Fundación FOESSA (relacionada con Cáritas), según los cuales los hogares valencianos están en una situación de mayor vulnerabilidad y exclusión: el 64,9% de ellos no están plenamente integrados (63,1% en España), el 14,5% se sitúan en la exclusión moderada (1,4 puntos sobre el total estatal) y el 11,5% de los hogares padece exclusión severa (2,7% más que la media española).

Cerca de 495.000 hogares valencianos se ven afectados por procesos de exclusión social, es decir el 26% del total de los hogares. Dentro del espacio de la exclusión en la Comunidad Valenciana destacan los más de 218.000 hogares (el 44,1% del total de la exclusión) que se encuentran en situación de exclusión severa. Un total de 3,8 millones de hogares están afectados en España por distintos procesos de exclusión social, lo que supone 1,2 millones más que en 2007, con un crecimiento del 48%.

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