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Un grupo disidente de Sortu alentará actos violentos en favor de los presos

Operativo en Bizkaia, donde ha calcinado ocho autobuses, fue criticado por ETA

Estado en el que quedaron los tres autobuses calcinados por desconocidos el pasado sábado en Bilbao.
Estado en el que quedaron los tres autobuses calcinados por desconocidos el pasado sábado en Bilbao.ALFREDO ALDAI (EFE)

Un grupo operativo en Bizkaia, surgido del sector de disidentes con la apuesta política de la izquierda abertzale y aglutinado en Ibil (Asamblea Revolucionaria Caminar) es el responsable de los dos últimos brotes de kale borroka registrados en menos de un mes con el balance de ocho autobuses calcinados y unas pérdidas próximas a los dos millones de euros. Esta es una de las conclusiones de las primeras líneas de investigación abiertas por la Ertzaintza y de la que también se desprende que este grupo cometerá “atentados puntuales” para reivindicar su exigencia de autodeterminación de Euskadi y el regreso de presos y exiliados de ETA.

Las primeras acciones violentas de este grupo partidario de “mantener activa la lucha” se produjo a partir de la desaparición del principal inspirador de Ibil, el profesor navarro Fermín Sánchez Agurruza, que se encuentra en paradero desconocido desde que el pasado mes de abril dejó de impartir clases en el colegio Urdax-Zugarramurdi, siendo expedientado por el Gobierno de Navarra.

Durante las fiestas locales de varios municipios vascos en este verano se prodigó el reparto de octavillas en favor de “la lucha” hasta que el pasado 20 de agosto unos desconocidos calcinaron cinco autobuses en Loiu (Bizkaia). En su reivindicación, mediante un correo electrónico a EiTB (televisión pública vasca) los autores denunciaron la situación de diez presos de ETA enfermos y reclamaron su puesta en libertad.

No ha sorprendido

Fuentes de la investigación reconocen que no les ha “sorprendido” este rebrote de actos violentos por parte de un mismo grupo que viene manteniendo sus críticas abiertas a la línea política decidida por la izquierda abertzale y que incluye el cese de la violencia por parte de ETA.

A su vez, la Ertzaintza descarta que la quema de tres contenedores en el barrio bilbaíno de San Ignacio y que afectaron a seis coches aparcados tenga alguna relación con este brote de ‘kale borroka’

Esta escalada violenta preocupó a la izquierda abertzale que lo condenó con rapidez y, especialmente, a la banda terrorista que de manera inesperada criticó en su comunicado del pasado sábado las disidencias que advertía entre la militancia soberanista en favor de las vías democráticas. Precisamente la consideración que ETA presta a este brote de rebeldía dentro del mundo abertzale no pasó desapercibida ayer entre quienes siguen de cerca los movimientos en torno al proceso de paz porque confirma que “le preocupan” las críticas a su vía política y a las que se sumarían las aportadas desde Eusko Ekintza (Acción vasca), otro grupo crítico con Sortu por haber anulado al resto del movimiento popular vasco, según dijeron en su presentación a finales de 2012.

Sin embargo, ETA fue desoída coincidiendo, además, con el Gudari Eguna (Día del Luchador). Tres autobuses, propiedad de la Diputación de Bizkaia, fueron calcinados el mismo sábado en Zorroza (Bilbao). Sus autores, mediante un extenso comunicado de reivindicación, también en euskera y enviado a tres medios abertzales, aportaron un análisis político mucho más detallado que el emitido en agosto y que ha sorprendido a la investigación y a fuerzas políticas vascas.

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Con una cuenta diferente de correo electrónico, este grupo anónimo denuncia en esta ocasión los “escasos avances” que, en su opinión, ha propiciado el cese de la violencia para los presos y refugiados de ETA. “Es un análisis mucho más profundo que el anterior atentado. Lo han hecho con más calma e intención”, aseguran fuentes de la investigación que temen nuevos episodios de kale borroka aprovechando días de “especial significado para la militancia abertzale”.

No obstante, tras el atentado de agosto, este grupo fue desautorizado por Etxerat, la agrupación de familiares de presos y refugiados. por entender que “estas acciones eran perjudiciales” para su estrategia. EH Bildu volvió a condenar el último atentado, aunque Andoni Ortuzar, presidente del PNV, no dudó en apelar a la izquierda abertzale para que “ataje” cuanto antes los actos de violencia que todavía se registran en Euskadi. Entrevistado en Onda Vasca, recordó cómo “ellos nos dijeron que hacían las cosas de la manera que las hacían; las hacían más lentas, a un ritmo diferente del que nosotros queríamos, porque querían llevar a todo el mundo de la izquierda abertzale, y parece que empieza a deshilacharse todo ese mundo de la izquierda abertzale".

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