Fianza de 200.000 euros para dos ‘mossos’ por el ‘caso Quintana’

Los dos mossos imputados por las lesiones sufridas por Ester Quintana, quien perdió un ojo presuntamente por una pelota de goma, deberán depositar una fianza de 200.000 euros para cubrir una eventual indemnización a la mujer. El juez ha decidido, además, dar por concluida la investigación y procesar a los dos policías, un subinspector y un escopetero. Ambos permanecen imputados por el presunto disparo de un pelotazo que reventó el ojo a Quintana durante la huelga general de noviembre de 2012. El Departamento de Interior siempre ha negado que la lesión de la mujer fuera consecuencia de una pelota de goma, aunque ha ido modificando su versión sobre lo ocurrido.

El magistrado Francisco González Maíllo reitera su tesis de que la manifestante fue herida por el impacto de un objeto compatible con una pelota de goma. El artefacto fue disparado, presuntamente, por el escopetero bajo las órdenes del subinspector cuando los manifestantes se retiraban y en un lugar donde no había incidentes, en la confluencia del paseo de Gràcia con la calle de Casp de Barcelona. La actuación policial, concluye el juez, no respetó el principio de “proporcionalidad”.

El informe pericial, que habla de la compatibilidad de las lesiones con una pelota de goma, es la base sobre la que ha pivotado la investigación. El juez da credibilidad a ese informe y también a los testimonios de Quintana y del enfermero que le atendió en los servicios de urgencias. Maíllo descarta también una de las versiones que, en su día, defendió el exconsejero de Interior Felip Puig: que Quintana fue herida por la acción de los vándalos. “Ni consta que se produjeran lanzamientos de objetos capaces de generar esas lesiones, ni tendría sentido lógico, pues vendría del lugar en el que se encontraban los agentes”, resuelve la resolución.

El juez concluye que la actuación de los Mossos no fue “proporcionada”

Los dos agentes deberán prestar la fianza de 200.000 euros “conjunta y solidariamente” para asegurar la responsabilidad civil en caso de que sean condenados. La pérdida de un ojo ha dejado a Quintana “secuelas físicas y previsiblemente psicológicas, razona el auto, además de un “evidente perjuicio estético”. El juez decreta el embargo de sus bienes en el caso de que no depositen la fianza en un periodo de 24 horas. La resolución llega después de que la Audiencia de Barcelona rechazara limitar a una mera imprudencia la actuación policial, al entender que cabe la posibilidad de que los mossos dispararan apuntando directamente a las personas.

Cuatro agentes de los Mossos, por otra parte, están llamados hoy a declarar ante el titular del juzgado de instrucción número 27 de Barcelona para intentar aclarar quién fue el policía autonómico que disparó la pelota de goma que segó el ojo de Nicola Tanno el 12 de julio de 2010.

El caso se ha archivado en dos ocasiones, ya que nunca se ha podido demostrar quién fue el agente que apretó el gatillo aquella noche que se celebraba el triunfo de la selección española en el Mundial de fútbol de Sudáfrica. Pese a ello, el letrado de la víctima, Pere Picón, ha conseguido que la Audiencia de Barcelona reabriera, las dos veces, la fase de instrucción.

La querella presentada por el representante legal de Nicola Tanno pretende que se castigue al autor material del disparo, por ahora un agente no identificado, por un delito de lesiones. Además, Picón ha solicitado la imputación del responsable policial que dio la “orden de disparar o que decidió que se empleara el arma”.

Nicola Tanno siempre ha asegurado que la noche en que tuvieron lugar los hechos se encontraba a más de 300 metros de la plaza de España en una zona calmada. La víctima asegura que se dirigía a la terraza de un bar cuando recibió el impacto de la pelota de goma.

Hoy declararán dos cabos y dos agentes de la policía de la Generalitat que la noche en que tuvieron lugar los hechos fueron los encargados de conducir dos de los vehículos policiales que actuaron esa noche.