_
_
_
_
_

El Consell abre la puerta a rectificar la fecha de inicio del curso escolar

María José Català admite que baraja rectificar el adelanto en plena protesta educativa

El consejero de Sanidad, Manuel Llombart, y la portavoz del Consell, María José Catalá.
El consejero de Sanidad, Manuel Llombart, y la portavoz del Consell, María José Catalá. Mònica Torres

La Generalitat baraja rectificar el recién implantado adelanto de las clases, una decisión que combinada con las altas temperaturas registradas en la comunidad autónoma ha incendiado el sector educativo en las últimas semanas. María José Català, portavoz del Consell y responsable de Educación, admitió ayer tras el pleno del Ejecutivo que su departamento tomará la decisión en mayo tras un “periodo de negociación y reflexión”. Entre mayo y junio se suele publicar el calendario del curso siguiente. El anticipo al 3 de septiembre de todas las clases —seis días de adelanto en Infantil y Primaria y 13, en Secundaria— ha generado protestas en el mundo educativo, críticas de la oposición y desmarques en su propio partido, encabezados por alcaldes como los de Dénia y Calp. Pero Català dijo no tener la impresión de que el conflicto haya erosionado al Consell o a su consejería. Consideró que el departamento que dirige está “haciendo un buen trabajo”.

La portavoz dejó caer que los sindicatos de enseñanza tienen elecciones en diciembre, en las que “se juegan mucho”. Y que los partidos concurrirán a los comicios autonómicos en mayo, lo que les habría llevado a extremar la protesta. Català llamó a “no hacer política en las aulas”. Fueron 2.000 estudiantes que se movilizaron por WhatsApp y las redes sociales, no los sindicatos, quienes llevaron ayer la protesta a la puerta de la consejería de Educación, con proclamas como “Nosotros sudamos y a vosotros os la suda”. También hubo manifestaciones estudiantiles en ciudades como Elche, Alcoi o Castelló.

La consejera aseguró que el jueves, día especialmente caluroso debido al viento de poniente, no se cerró ningún centro escolar. Pero tuvo que admitir que se produjeron “incidencias”, como la suspensión de las clases, en una decena de colegios e institutos de Alicante y Valencia. Una encuesta urgente hecha por la confederación Gonzalo Anaya entre sus asociaciones de padres obtuvo datos de incidencias en al menos un centenar de centros de toda la geografía valenciana.

Lo cierto es que las aulas de muchos institutos se quedaron medio vacías el jueves y el viernes, sobre todo desde mediodía. Lo certificaban los estudiantes que se concentraron ayer en la sede de la consejería, procedentes de varios centros de la capital y del área metropolitana. Llegados en manifestación desde las Torres de Serranos, reflejaban un salto cualitativo en las movilizaciones, hasta ayer circunscritas a los propios centros y su entorno. La asistencia de alumnado de centros concertados era también una novedad. Hicieron acto de presencia en segundo plano representantes del Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans y del Sindicato de Estudiantes; este último ha convocado una huelga para el día 18.

La voz cantante la llevaron alumnas del instituto Tavernes Blanques, al leer un manifiesto en el que reivindicaban “una educación digna, pública y de calidad”, criticaban el aumento de número de profesores por aula, e invitaban Català a pasar una mañana en sus “grandes instalaciones de saunas”. Presentaron, además, centenares de instancias para solicitar que “se suspendan las clases hasta que las temperaturas del aula no sobrepasen lo legal”; que Educación “adecue los centros para garantizar unas temperaturas soportables y legales”, y que “se recupere el calendario de los cursos anteriores”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_