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La Junta y el Consejo Social piden al Ayuntamiento que retome el plan Albaicín

El Gobierno y la entidad consultiva consideran el programa "fundamental" para la ciudad

Seis meses después de que el Ayuntamiento de Granada decidiera archivar el plan que debe marcar los pasos a seguir en el Albaicín, la Junta de Andalucía y el Consejo Social de Granada (CSG) le invitan a retomarlo. “Es fundamental para el futuro del barrio y para la ciudad”, según la secretaria general de Cultura, María del Mar Alfaro, que este martes se reunió con el presidente del Consejo Social de Granada, Francisco Martín-Recuerda.

El barrio, declarado por la Unesco Patrimonio Mundial en 1994, se rige por un plan especial de 1990. El Ayuntamiento, que gobierna en mayoría el PP, archivó el nuevo documento el pasado mes de marzo por la “falta de colaboración” de la Junta. Cinco años antes se había aprobado de forma inicial, pero ahí continúa estancado.Desde hace años las dos administraciones se culpan mutuamente de la inacción en el barrio y del deteriorado estado que en parte presenta, sin que lleguen a un punto de encuentro.

La redacción inicial es “responsabilidad única del Consistorio”, subrayó la Junta, que acusa a la Administración municipal de “desproteger” al barrio. El Albaicín está amparado en un plan con más de 20 años de antigüedad. Para adaptarlo a normas posteriores, como el Plan General de Ordenación Urbana o leyes de Suelo y Patrimonio, el Ayuntamiento inició su redacción. Tras su presentación, Cultura y Ayuntamiento intercambiaron puntos de vista durante años. En marzo pasado el Consistorio dijo que estaba “desesperado” y que sin la colaboración de la Junta no podía seguir avanzando. Esa falta de colaboración la niega el Gobierno autonómico, que reitera su “compromiso” para, una vez levantado el archivo, ponerse a trabajar junto a los técnicos municipales.

La protección y conservación del Albaicín se amplió al Sacromonte, el barrio de las cuevas que no tenía hasta entonces un documento por el que guiarse. Tras el archivo, sigue sin plan.

Los vecinos y distintas asociaciones han lamentado en más de una ocasión el estado en el que se encuentra parte del barrio, que el pasado fin de semana celebró el día mundial del Patrimonio con una serie de actividades que tampoco logró el consenso de las instituciones más cercanas.

El barrio morisco fue declarado Patrimonio Mundial diez años después que la ciudad palatina, pero su trayectoria ha sido muy diferente. La protección, la movilidad, la limpieza o la seguridad son algunas de las cuestiones aún pendientes.

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