Pachi Vázquez reta a Baltar a ser candidato a la alcaldía de Ourense
“Baltar sería un cobarde si no se presenta”, dice el socialista, que no aclara si él se postula para ser el aspirante del PSdeG
Primer asalto en la lucha por las alcaldías gallegas. El exsecretario general del PSdeG, Pachi Vázquez, no quiere perder la alcaldía de Ourense, un caramelo político conquistado hace siete años que se tambalea. “Vamos a ir a por todas”, aseguró en una rueda de prensa convocada para anunciar una batería de iniciativas parlamentarias contra la discriminación inversora, en la que acabó retando al líder provincial del PP y presidente de la Diputación a la alcaldía. “Baltar sería un cobarde si no se presenta”, aseguró Vázquez. El diputado socialista cree que los populares deben “dejar de marear la perdiz” para “poner a Baltar de candidato” porque es “el líder emergente, carismático y el que presume de ser todo” en la provincia. “No puede volver a esconderse debajo de la falda de su padre y ahora tiene que demostrar el liderazgo del que presume”, insistió antes de reclamar al presidente ourensano una candidatura “dando la cara y sin mandilón para no mancharse”.
"Pacto de silencio" sobre las fotos de Feijóo con Dorado
El exlíder de los socialistas gallegos, Pachi Vázquez, reclama explicaciones tras conocerse la investigación de la juez instructora de la Operación Pokémon, en la que indaga el origen de las fotografías publicadas por EL PAÍS, en las que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, posa con el narcotraficante Marcial Dorado. “En Galicia hay un pacto de silencio, un gran acuerdo para que el presidente de la Xunta se escape sin explicar qué hacía celebrando fiestas con Marcial Dorado durante nueve años”, denuncia el diputado socialista. “Yo tuve que escuchar cómo Feijóo me acusó de ser el filtrador de esas fotografías”, recordó antes de hacer alusión a una “trama” dentro del PP que conocía las polémicas imágenes en 2012.
Cuando todavía ocupaba la secretaría general del PSdeG, Vázquez afirmó en el Parlamento gallego que “Feijóo y el narcotráfico andan ahí, ahí”. Tras la difusión de las fotografías, los populares lo señalaron como origen de la polémica. Ahora cree que “Feijóo no puede marcharse sin explicar qué pintaba con este hombre. Y más cuando había una trama interior en el PP que tenía constancia de todo eso”. En la instrucción judicial figura una conversación de Luciano Prado, el hermano de la exportavoz del PP gallego, en la que afirma haber visto las fotografías de Feijóo y Dorado un año antes de que este periódico las difundiera. En la misma conversación también advierte a su interlocutor, el exjefe de gabinete del exalcalde de Santiago, Gerardo Conde Roa, de pinchazos en los teléfonos de numerosos cargos populares.
Y es que poco se sabe de las intenciones de los conservadores. En las listas de alcaldables figuran, entre otros, el conselleiro de Educación o el subdelegado del gobierno. Jesús Vázquez descarta esa posibilidad tanto en público como en privado y Roberto Castro evita pronunciarse. Mientras, la supuesta mudanza de Baltar hijo al Ayuntamiento cobra fuerza según se aproximan los comicios. En los últimos meses ha multiplicado sus actos públicos en los barrios y encuentros con agentes sociales y económicos. Además y en al menos dos ocasiones, ha evitado confirmar al actual líder local del PP como candidato en 2015. Rosendo Fernández trabaja activamente en la oposición municipal, pero también ocupa la vicepresidencia de la Diputación. En caso de renuncia, ocupa un destacado puesto de salida para el salto al escaño presidencial.
Pachi Vázquez agitó la candidatura de Manuel Baltar, pero sin embargo pasó de puntillas por su propia casa. A pesar de la insistencia de los periodistas, ni confirmó ni desmintió su presunto interés por Ourense, un rumor presente en todos los mentideros políticos. “Estaré siempre donde me mande el partido”, afirmó tras aclarar que su partido tiene “cuatro, cinco o seis personas que pueden ser excelentes candidatos, aunque todo dependerá de la unidad de la candidatura”. Al liderazgo local del PSdeG –dividido en dos familias enfrentadas– se le avecinan oscuros nubarrones. La continuidad del actual alcalde, Agustín Fernández, pende de un hilo. El inminente cierre de la instrucción en alguna de las doce causas judiciales que rodean al gobierno local y su posible envío a juicio, supondría un veto directo a su candidatura. Los afines a Pachi Vázquez tampoco las tienen todas consigo: sus cinco ediles en el Ayuntamiento están suspendidos de militancia tras el posicionamiento de la dirección gallega al lado de Agustín Fernández y tampoco ostentan el control de la agrupación local del partido. Aunque el diputado reclama una “búsqueda hasta la extenuación del consenso, la unidad y el diálogo” para esa candidatura, las primarias que se celebrarán en cuestión de semanas agitarán todavía más la fontanería política de esta longeva reyerta familiar.
