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Trias abona el terreno para una nueva prórroga presupuestaria

El alcalde reconoce que un pacto con otros partidos es difícil

Con la convocatoria de la consulta independentista a la vuelta de la esquina, los cambios en los liderazgos de los grupos municipales en Barcelona y solo 14 regidores en el Gobierno, Convergència i Unió lo tiene difícil para aprobar sus últimas cuentas antes de iniciar la carrera por la reelección. Ayer, en un ejercicio de realidad, el alcalde Xavier Trias dejó la puerta abierta para una nueva prórroga presupuestaria.

“Yo haré lo posible por negociar unos Presupuestos, pero el sentido común me dice que eso será casi imposible”, aseguró el alcalde durante su visita a las fiestas de Gràcia. Trias explicó que después de este verano prevé sostener reuniones con todos los grupos y de “conocimiento” con el nuevo alcaldable de ERC, Alfred Bosch y con Jaume Collboni, cabeza de cartel del PSC.

La prórroga se antoja entonces como el escenario más evidente. Algo que la oposición también parece tener asumido. El equipo de Trias sólo ha aprobado dos cuentas, unas con el apoyo del Partido Popular —con quien también hizo un pacto inversor— y las de este año, a través de una moción de confianza en las que vinculaba su continuidad al visto bueno a las cuentas.

 

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