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Anuladas por enchufismo dos oposiciones del Ayuntamiento de Xinzo

El juez sostiene que el alcalde incurrió en desviación de poder al eligir a dedo al tribunal que aprobó a su novia y a la hija de un excargo del PP

El alcalde de Xinzo de Limia y diputado provincial del PP, el baltarista Antonio Pérez, acumula nueve sentencias por enchufismo. Un juzgado ourensano acaba de sentenciar que el regidor seleccionó a dedo un tribunal para resolver las oposiciones a una plaza de administrativo para el municipio que preside a la que se presentaba su novia. Los examinadores, vinculados al mismo partido que él y compañeros suyos en la Diputación de Ourense -en donde Pérez es responsable por delegación directa de Baltar de la dirección y gestión política- otorgaron la mayor puntuación al examen de su pareja que no tuvo problema en hacerse con la plaza. Tras la denuncia presentada por el comité de empresa, de la CIG, el juez concluye que existió desviación de poder y anula esta oposición y otra de jurista para el mismo ayuntamiento a la que se presentó –y aprobó- la hija del exdelegado provincial de la Consellería de Agricultura, el también baltarista Agustín Prado Verdeal.

En este último caso, al tribunal formado por los mismos funcionarios y concejales del PP que el anterior, presididos por el jefe de Recursos Humanos de la Diputación y presidente del PP local del Ayuntamiento de Monterrei, José Luis Suárez, se sumó la pareja del alcalde de O Carballiño, el también diputado provincial Argimiro Marnotes. El único integrante del tribunal que era funcionario de la Xunta había sido secretario provincial de la delegación de Medio Ambiente bajo el mandato del padre de la opositora aprobada.

Al juez le ha llamado la atención la selección del tribunal realizada por Pérez considerando que “debió de abstenerse de dictar resoluciones” en este procedimiento administrativo “tras la presentación de la candidatura” de su novia. La sentencia pone de relieve que sin embargo el alcalde “no solo no se abstuvo sino que dictó una resolución relevante para escoger y designar a los miembros del tribunal”. También expresa su sorpresa el juez porque entre los examinadores de la plaza a la que se presentó la pareja del alcalde no estuviese el secretario municipal ni ningún funcionario de la Xunta, contrariamente a lo que “es habitual en estos procesos selectivos”.

Junto al jefe de Recursos Humanos (el mismo a quien el expresidente ourensano, José Luis Baltar, acusó en su juicio por enchufismo de no haberle advertido de que había que publicitar los puestos de trabajo) formaron los tribunales de las oposiciones impugnadas un concejal del PP en el Ayuntamiento de Esgos (municipio fetiche del baltarismo, cuna de los Baltar) y actuó como secretario el exalcalde popular de Nogueira de Ramuín y jefe del servicio jurídico de la Diputación, José Eugenio Galindo.

Sin poner en duda la “honestidad y competencia profesional” de los miembros del tribunal, entiende el juez que en ambas oposiciones se quebraron los principios de objetividad e imparcialidad destinados a evitar “cualquier sospecha de interferencia política o ideológica” para evitar “prácticas ilícitas de favoritismo o clientelismo político”. El Ayuntamiento de Xinzo tiene 15 días para recurrir la sentencia ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

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