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Rescatado el cuerpo del submarinista que murió atrapado en una cueva en L’Estartit

La Guardia Civil atribuye el accidente a un “exceso de confianza”

Vídeo: Guardia Civil

Los hechos comenzaron el sábado cuando un grupo de tres submarinistas de entre 52 y 61 años se sumergieron hacia las diez de la mañana en la zona de la Cueva de los Arquets, a unos ocho metros de profundidad y a una milla al norte del puerto de L’Estartit (Baix Empordà). Pero algo salió mal. Uno de los tres submarinistas subió a la superficie y al ver que sus compañeros no salían llamó a emergencias. El domingo, la Guardia Civil rescató con vida a uno de los dos hombres, después de pasar 30 horas atrapado en la cueva. Ayer se puso fin al trágico episodio, cuando recuperaron el cadáver del tercer submarinista.

El rescate empezó de inmediato el sábado. Los agentes establecieron una línea de seguridad de 45 metros, el punto en el que la cueva se estrecha de manera pronunciada hasta quedar en 80 centímetros de diámetro, lo que permite el paso justo de un submarinista rozando las paredes. De ahí en adelante, la cavidad no había sido explorada. Pero tuvieron que suspender las tareas, debido a la mala mar.

El domingo el equipo localizó con vida a uno de los dos submarinistas, estaba a 80 metros del inicio de la cueva. Fernando Aguirre, jefe del grupo de rescate de la Guardia Civil, confirmó que tenía “un hilo de vida” porque le quedaba “muy poco oxígeno y no podía agarrarse a ninguna parte”. Además, la situación marítima era muy complicada y la “visibilidad era casi nula”. El hombre, de 52 años y vecino de Barcelona, sobrevivió unas 30 horas a oscuras dentro de la cueva gracias a una burbuja de aire. Además, presentaba, una grave hipotermia, dificultad para respirar, intoxicación por anhídrido carbónico y deshidratación. Los submarinistas del Grupo Nacional de Espeleobuceo Avanzado de la Guardia Civil realizaron 14 inmersiones mediante relevos, para que en todo momento el hombre estuviese acompañado. Cinco horas después, lograron sacarle a la superficie.

Ayer lunes se reanudó el rescate y a mediodía encontraron el cadáver del submarinista, de 63 años y natural de Gavà (Baix Llobregat). Estaba a 47 metros del punto donde fue localizado su compañero rescatado con vida.

La Guardia Civil atribuye la tragedia a un “exceso de confianza” y falta de conocimientos de espeleología. El grupo tampoco llevaba el material adecuado y no hizo lo más importante: desplegar una cuerda de seguridad que les permitiera encontrar el camino de regreso sin problemas, con o sin condiciones adversas.

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