La enérgica ‘Wonderland’ inaugura el Grec 2014
La coreografía no encuentra en el anfiteatro su lugar idóneo
Momentos de indudable fuerza coreográfica y otros poco inspirados. El espectáculo de danza Wonderland, que anoche inauguró oficialmente el festival Grec en el anfiteatro (y hoy repite) en una muy agradable y concurrida noche de verano, no convenció a la mayoría del público. No fueron pocos los que opinaron después, en la tradicional copa en los jardines, que se trata de un montaje demasiado árido, poco apropiado para la velada de inauguración del Grec, que pide algo más festivo. Pieza de innegable calidad técnica, aunque a ratos de un cierto virtuosismo feísta, grotesco, carece de la altura emocional que la eleve para convertirla en un espectáculo inolvidable.
El marco tampoco fue el más adecuado para la propuesta que hubiera funcionado mejor en un escenario más pequeño y sin los problemas del aire libre como la humedad en el suelo. Los 12 bailarines, ataviados de manera que no hubieran desentonado en la 080 Barcelona Fashion, evolucionaron bajo una serie de músicas que incluían desde música clásica y canción tradicional hasta techno y sonidos estentóreos. A diferencia de la obertura popular del Grec el lunes con la Fura dels Baus, anoche se abroncaba a los que usaban el teléfono móvil.
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