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Mas asegura que el precio de dar marcha atrás en el soberanismo sería “muy alto”

El presidente asegura ante 700 empresarios leridanos que es importante tener un proyecto

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha dicho esta mañana en la inauguración del 25 Encuentro Empresarial del Pirineu que se celebra en La Seu d’Urgell que Cataluña no puede dar marcha atrás en el proceso soberanista porque el precio a pagar sería “muy alto” y no nos llevaría a una situación mejor.

Más ha explicado ante 700 empresarios leridanos de todos los sectores productivos que es importante tener un proyecto y saber hacia dónde se va. En este sentido, ha añadido que en este momento, Cataluña tiene “un proyecto definido, que no pretende negar nada ni ir contra nadie”, sino que es un proyecto propio que va hacia delante de forma “positiva, serena y pacífica”, con la esperanza de encontrar en el otro lado un clima que permita acordar las cuestiones sin renunciar a los proyectos básicos de fondo.

Para Mas, el éxito del proceso soberanista requiere de unas condiciones e instrumentos diferentes de los de las últimas décadas, además de un mejor clima para el acuerdo y una mayor receptividad por parte del Estado: "Cuando llamamos a la puerta para establecer esas condiciones, no hay una respuesta ni clara ni positiva más allá del enrocamiento”.

“Por eso”, ha añadido, “insistiremos en esta manera de hacer. En cualquier caso el proyecto catalán no se puede parar porque el precio que hoy pagaríamos sería muy alto, y eso es algo que tiene presente una mayoría de la sociedad catalana, donde hay un porcentaje muy significativo de gente que ha entendido que por la vía tradicional no lo conseguiremos”.

Respecto a las balanzas fiscales dadas a conocer ayer, Mas se ha remitido a las cifras hechas públicas por el consejero Andreu Mas-Colell y ha remarcado que el desequilibrio actual coloca a la economía de Cataluña en una situación muy complicada, ya que no solo frena, sino que “resta capacidades y posibilidades” económicas. “Detrás de esto están el estado del bienestar, la sanidad, la educación, los servicios sociales, las infraestructuras y las políticas de competitividad del país. Nos jugamos todo eso y por eso necesitamos tener unos instrumentos normales para seguir con nuestro proyecto”, ha dicho.

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