El Gran Premio de Motociclismo de Jerez deja más de 50 millones de beneficios
Un dispositivo de 4.910 personas vigila y asiste a más de 200.000 aficionados y 50.000 motos
El aplastante dominio español en el deporte de las dos ruedas, el puente del primero de mayo y unas excelentes previsiones meteorológicas presagian que el Gran Premio de España de Motociclismo que arranca este viernes en Jerez puede batir todas sus marcas. A las nueve de la mañana comenzarán los entrenamientos libres en el trazado andaluz, pero no será hasta la tarde del viernes cuando irrumpa la avalancha motera en Jerez, la bahía de Cádiz y parte de la sierra. Hasta el domingo se espera el paso por la provincia de más de 200.000 aficionados y 50.000 vehículos de dos ruedas.
El Gran Premio de España de Motociclismo es el evento deportivo más importante de cuantos se celebran en Andalucía, una de las mayores concentraciones moteras de Europa y una inyección económica vital en la provincia con más tasa de paro del país (43,23%, según los datos de la EPA del primer trimestre de 2014).
La hostelería se prepara para hacer caja. Será el fin de semana más rentable del año y las expectativas son buenas. La reserva de entradas en el circuito ha sido similar a la de los últimos años, pero en esta edición las localidades con precios más elevados se han vendido con más rapidez. El puente festivo y el clima se han aliado para disparar el optimismo en una comarca demasiado azotada por la crisis.
Los datos facilitados por la Consejería de Turismo y Comercio cifran el impacto económico del evento en 51,5 millones de euros. Una cantidad que se eleva a los 100 millones de euros al incluir la repercusión mediática y promocional. En 2014 se espera repetir los resultados de la edición precedente, en la que se incrementó en casi un 20% tanto la llegada de visitantes como el gasto turístico.
Las previsiones hoteleras superan en un 1,5% a la ocupación real registrada el ejercicio pasado. Entonces se alquilaron el 94% de las habitaciones de la provincia y ciudades como Jerez, Rota, El Puerto, Sanlúcar y Arcos rozaron el lleno. La demanda ha crecido y ya en las jornadas previas al mundial 2014 no era posible encontrar camas en los hospedajes de varias localidades cercanas al circuito.
Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Jerez financian la prueba deportiva. La Consejería de Turismo destina 2,78 millones de euros a costear el canon que exige Dorna (organizador del campeonato) mientras que el Consistorio aporta los ingresos de taquilla, un capital que recauda la administración jerezana por segundo año consecutivo después de que el gobierno local del PP rescatara la gestión privada del circuito en 2012. Para el consejero Rafael Rodríguez la inversión “excepcional” que hace la Junta en este evento está “justificada, por la gran repercusión y el retorno económico que se consigue”.
Al margen de los mencionados 50 millones de gasto turístico directo, la consejería ve en el mundial un importante soporte para promocionar el destino Andalucía. La señal televisiva del evento llega a 280 millones de hogares y este año la publicidad de Turismo Andaluz se verá en la retransmisión de cuatro grandes premios al tener presencia en curvas del trazado de Jerez, Cataluña, Alemania y República Checa.
Este fin de semana las Administraciones activan un dispositivo de seguridad que moviliza a 4.910 personas. A los más de 1.600 agentes de la Guardia Civil desplegados en las carreteras de todo el país, se añaden desde este viernes 700 agentes en la provincia de Cádiz, 350 de ellos en las inmediaciones del circuito. La presencia de efectivos se completa con varios helicópteros que vigilan las vías de acceso a Andalucía desde el aire. Además, el Estado refuerza con 700 agentes los cuerpos de Policía Nacional de la provincia y traslada a Jerez y El Puerto de Santa María siete unidades antidisturbios y un escuadrón de caballería. La Junta por su parte moviliza a más de 800 personas, en su mayoría personal sanitario, en el circuito de velocidad y en centros hospitalarios. El esfuerzo ya se ha visto recompensado. Las dos últimas ediciones se han cerrado sin víctimas mortales y el Gran Premio de España de Motociclismo ha sido reconocido por Dorna como el más seguro del calendario mundial.
Al margen de la actividad en el trazado, el centro de Jerez vuelve a estar abierto a las motos una vez superados los desfases de años atrás. Acoge conciertos y firmas de pilotos en varios puntos de la localidad.
El Circuito de Velocidad estrena un Museo del Motor
Después de varios años persiguiéndolo, el Circuito de Velocidad de Jerez tiene un complemento para los aficionados más nostálgicos: un Museo del Motor.
Se trata de un espacio de 600 metros cuadrados donde se exhiben, sobre curiosos polígonos de madera, verdaderas joyas de la Fórmula Uno y de las distintas categorías de los campeonatos mundiales de motociclismo a lo largo de su historia. Una de las piezas emblema de la instalación es el monoplaza Williams FW11 que pilotó Nigel Mansell en 1986 en Jerez y con el que protagonizó junto a Senna la llegada más ajustada de la F1: el británico, tras una épica remontada, llegó 14 milésimas de segundo… por detrás del brasileño. Una carrera recordada por muchos.
Otra de las piezas expuestas es la Ossa monocasco, diseñada por el ingeniero español Eduardo Giró en 1970. Esta moto fue una revolución en su época, aunque se vio eclipsada por la trágica muerte de su piloto, Santiago Herreros, en la TT de la Isla de Man.
Una JJ Cobas de Jorge Martínez ‘Aspar’, el bólido Arrows con el que Pedro Martínez de la Rosa logró su primer punto en la Fórmula Uno, o un Lotus Renault del campeonato de F1 2010 se exhiben junto a cascos, guantes, monos y otras prendas de competición de pilotos como Ayrton Senna, Valentino Rossi, Fernando Alonso, Lewis Hamilton, Ángel Nieto, Álex Crivillé, Jorge Lorenzo, Marc Márquez, Jaime Alguersuari o Alex Wurth. Varias motocicletas más, neumáticos de distintas categorías, trofeos, fotografías, carteles y hasta dos capós de coches firmados por Dalí acompañan esta colección que añade un simulador de tumbadas con una Honda CBR capaz de inclinarse del mismo modo que sólo hacen los grandes campeones de Moto GP.
La muestra ha de verse siguiendo un revirado pasillo que imita el propio trazado del circuito jerezano, incluyendo, para los despistados, el nombre de cada curva en el suelo.
El museo abre todo el año. El precio de la entrada oscila entre los tres y los seis euros, con acceso gratuito para los menores de siete años. Hasta el domingo hay un precio único de tres euros.
