La CIG presentará una querella contra la cúpula de las antiguas cajas gallega

El sindicato CIG presentará una querella criminal ante la Audiencia Nacional contra las cúpulas de las antiguas cajas gallegas —tanto Caixa Galicia como Caixanova y la fusión de ambas— y la de NCG Banco por la comercialización de participaciones preferentes entre minoristas. Los abogados que han preparado la querella señalan por el momento a 79 personas, entre las que se encuentran los antiguos directores generales de Caixa Galicia y Caixanova, José Luis Méndez y José Luis Pego respectivamente, y sus expresidentes Mauro Varela y Julio Fernández Gayoso.

Entre los delitos que les atribuyen figuran estafa, apropiación indebida, publicidad engañosa, estafa de inversores, falsedad de cuentas anuales, administración fraudulenta y desleal y abuso de información privilegiada. La querella se dirige contra los consejos de administración, las comisiones de control y los comités de dirección de las entidades desde 2003, cuando comenzaron a emitir preferentes. También se incluye a la actual cúpula como “encubridores y receptadores”, informa Europa Press.

La CIG siente “la responsabilidad como organización social de no permitir” que “se vayan de rositas” los responsables de “esta tremenda estafa”, afirmó el líder del sindicato, Suso Seixo, quien criticó que los gobiernos que deberían impulsar acciones “están impidiendo incluso buscar una solución”. Los abogados Guillermo Presa y Xan Díaz consideran que hubo “una estrategia organizada y perfectamente pensada de comercialización a personas para las que no estaban pensados” estos complejos productos financieros. Los letrados consideran que la comercialización fue “indiscriminada”, aprovechando que la regulación era “insuficiente” y que los clientes mantenían una relación de confianza.

La CIG denuncia que en 2009 se registraron tres emisiones de preferentes pese a que las cajas sabían que “era imposible dar cumplimiento” a lo que vendían, ya que para devolver el dinero a un cliente era necesario acudir a “un mercado secundario inexistente”. Los promotores de la querella subrayan que los afectados que lo deseen podrán sumarse cuando sea admitida, aunque hayan acudido ya a la vía civil para recuperar su dinero.