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Els Pelegrins de Les Useres inician su marcha con la mirada puesta en la Unesco

Els Pelegrins de Les Useres, con siete siglos de historia, aspira a patrimonio de la humanidad

Los peregrinos a la salida de Les Useres.
Los peregrinos a la salida de Les Useres.ÀNGEL SÁNCHEZ

Como cada último viernes de abril, y desde hace siete siglos, Les Useres ha vuelto a cumplir con la tradición. A las ocho de la mañana, los peregrinos, descalzos, han avanzado sobre el manto de hiedra que aguardaba su salida del templo para iniciar, en completo silencio, el camino de 35 kilómetros que les separa del santuario de Sant Joan de Penyagolosa, en Vistabella y a los pies del macizo más alto de la Comunidad Valenciana, al que llegarán entrada la noche.

La peregrinación penitencial de Els Pelegrins de Les Useres –son 13: un guía, que escenifica la figura de Jesús, y 12 acompañantes, que simulan a los apóstoles- se remonta al siglo XIV, tiene su origen en la peste y los graves periodos de sequía sufridos por la población y puede presumir de preservar tanto tiempo después su esencia original. Sin embargo, la intacta tradición ancestral ha sumado este año una novedad: la marcada por la candidatura a Patrimonio de la Humanidad de la Unesco a la que opta la propuesta Camins del Penyagolosa, de la que forma parte la romería de Els Pelegrins, y en la que se integran también las poblaciones de Xodos, Vistabella y Culla.

En Les Useres se ha iniciado hoy la recogida de firmas para que Camins del Penyagolosa aspire a ser patrimonio mundial por la Unesco en 2016. El objetivo inicial es conseguir 50.000 apoyos para trasladar la petición al Ministerio de Cultura.

Salvo por la novedad de las firmas incorporada a la jornada, la de este último viernes de abril ha seguido el mismo patrón que el diseñado siete siglos atrás y, de nuevo, no ha dejado indiferente a ninguno de los cientos de visitantes agolpados en las calles de esta pequeña población de L’Alcalatén para ver la salida de los 13 peregrinos.

Entre esa multitud estaba Héctor Gozalbo, párroco de la iglesia de San Francisco de Castellón y a quien, como él mismo narra, le ata un lazo especial con esta peregrinación: “En 2009 subí a Sant Joan como sacerdote acompañando a Els Pelegrins; lo solicité en 2004, un año antes incluso de ordenarme cura. Y así hasta hoy, no he fallado nunca, porque fue tanto el impacto y la vivencia que supuso para mí compartir el camino con ellos que personalmente decidí que mientras pudiera participar de esta peregrinación penitencial lo haría”.

Hacia las ocho y media de la tarde, Els Pelegrins llegarán a destino, aunque no entrarán en el santuario hasta que anochezca. Volverán a hacerlo descalzos –un rito que realizan hasta tres veces en el camino de ida: a su salida de Les Useres, en Sant Miquel de les Torrocelles (Llucena) y en Sant Joan- y una vez dentro pedirán “por intercesión del santo, salud, paz y lluvia del cielo”, explica Héctor Gozalbo. Este sábado iniciarán el camino de regreso a Les Useres.

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