El Memorial de Víctimas ocupará la sede del Banco de España en Vitoria
El Ministerio del Interior asumirá la rehabilitación del edificio, vació desde hace años
La ubicación del Memorial de Víctimas del Terrorismo, pactada este miércoles entre el alcalde de Vitoria, Javier Maroto, y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, para que sea la capital la que lo albergue, ya tiene edificio. El Ayuntamiento de la ciudad ha comunicado este jueves que el centro se ubicará en el edificio del Banco de España, situado en pleno corazón de la ciudad y vacío desde hace años.
El majestuoso edificio necesita de una rehabilitación que asumirá el Ministerio del Interior, anunció Maroto, en lo que describió como una decisión “definitiva y firme”.
El alcalde reclamó que los contenidos del centro, que debe ser creado por el Gobierno central en Euskadi en función de la Ley de Reparación de Víctimas de 2011, sean “acordados” entre todas las instituciones.
Un día antes, tras el encuentro en Madrid, el Gobierno central aseguró que tratará de trabajar con el Ejecutivo vasco, con el que en el último año ha mantenido una relación tirante en lo que al Memorial se refiere. Este jueves, el secretario general para la Paz y la Convivencia de la administración vasca, Jonan Fernández, dijo no tener “ninguna objeción” que hacer ante la decisión de ubicar el centro en Vitoria y puso en valor que, tras dos años, “parece que ahora se pone en marcha”.
El enfoque que Interior quiere dar al Memorial ha sido motivo para la queja de EH Bildu. Su portavoz en esta materia, Julen Arzuaga, acusó al Gobierno central de querer generar un “conflicto memorialístico”, ya que en el Parlamento se está trabajando para crear otro organismo, el Instituto de la Memoria, con cuya futura ley la coalición está más cómoda.
Arzuaga explicó que apuestan por “un único Memorial, una única institución a favor de los derechos humanos”, y que esta sea el Instituto de la Memoria porque será “integral, integrador e inclusivo”, en vez de la “construcción parcial” que EH Bildu teme que sea el Memorial. Por esta razón, la coalición se mostró extrañada por el “aplauso” del Gobierno vasco. Este último episodio es para la coalición otro ejemplo —mencionó el informe de prestigiosos juristas vascos con el que critican que se haya denegado indemnizaciones a víctimas de los GAL alegando con informes policiales y no con sentencias firmes que forman partes de grupos criminales— de una “estrategia” para “invisibilizar” a víctimas de otras vulneraciones de derechos humanos a las que generó ETA.
