El juez imputa a Oriol Pujol por soborno en el ‘caso ITV’

El juez ha formalizado hoy la nueva imputación de Oriol Pujol Ferrusola en el caso ITV; esta vez, por un delito de soborno. En un auto, el magistrado Enric Anglada acepta la petición de la Fiscalía Anticorrupción y cita a declarar al diputado nacionalista y a otras tres personas: su mujer, Anna Vidal, y los empresarios Ricard Puignou y Sergi Alsina. Según las acusaciones, Pujol cobró 30.000 euros de los empresarios a cambio de defender sus intereses durante la tramitación de la Ley de Seguridad Industrial. En 2008, el Gobierno catalán -en manos, entonces, del tripartito de izquierdas- aprobó la ley que suponía un nuevo marco para el negocio de las estaciones de la inspección técnica de vehículos.

El auto acuerda que se siga el procedimiento del jurado popular para sentar a Pujol en el banquillo por cohecho. El ex número dos de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) ya está imputado en la causa por tráfico de influencias. Según los investigadores, presionó a altos cargos de la Generalitat para situar a personas de su confianza en puestos clave del sector de las ITV. Pujol usó su "peso político" para "lucrarse personalmente" con la trama, que presuntamente trató de tumbar una adjudicación de estaciones de ITV para lograr otra a la medida de sus intereses.

El documento judicial no especifica la fecha en la que declararán Pujol y los otros tres imputados; fuentes judiciales, sin embargo, han explicado que será a finales del próximo mes de abril. El magistrado reitera que existen "indicios racionales" de que el diputado cobró un soborno de 30.000 euros. Así lo puso de manifiesto uno de los últimos informes elaborados por la Agencia Tributaria, el pasado mes de diciembre. En el documento constan decenas de correos electrónicos que intercambiaron los miembros de la trampa. Esos documentos revelan que el empresario Puignou pagó diversas sumas de dinero a Alsina -amigo íntimo de Pujol y, además, jefe y socio de su esposa- a cambio de que influyera en el dirigente nacionalista para que su grupo, Convergència i Unió, presentara enmiendas al proyecto del tripartito.

Uno de esos correos ha resultado clave en la investigación. Enric Marugán, otro de los empresarios implicados, explica el resultado de una supuesta reunión entre su socio (Puignou) y Pujol: “Harán campaña mediática y, aunque no mandan, piden 30.000 euros!!” La cantidad coincide exactamente con la solicitada por Alsina para lograr influir en la tramitación de la ley. La Fiscalía considera que el dinero llegó a Pujol a través de una de las empresas de su esposa.