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Raúl Arza reclama un foro de diálogo social permanente

El líder de UGT-Euskadi reclama un marco propio de negociación colectiva

Bilbao -

El secretario general de UGT-Euskadi, Raúl Arza, ha reclamado este miércoles la puesta en marcha de "un foro de diálogo permanente entre quienes quieran participar y diseñar el futuro" de las relaciones laborales y de la política vasca.

Arza ha ofrecido una conferencia en Bilbao, organizada por Nueva Economía Fórum, en la que ha estado presentado por el secretario general del PSE-EE, Patxi López, quién ha defendido que "el objetivo de las relaciones laborales debe ser la defensa de la empresa como un proyecto de futuro compartido entre empresarios y trabajadores".

Raúl Arza ha criticado que haya un sindicato, -en referencia a ELA- "que ha decidido no construir y no implicarse" en los acuerdos y que trate "de coartar" al resto de formaciones. Ha confiado en que, "como ha dicho el lehendakari, el año 2014 sea el año del diálogo social" y que haya "un foro permanente" en el que sea posible discutir, "independientemente de coyunturas y de quién esté gobernando".

UGT-Euskadi reclama un marco propio de negociación colectiva para esta comunidad autónoma, "que no solo es posible, sino que además es necesario". "Pero mientras eso no llegue, no podemos estar parados", ha advertido. Arza ha instado al resto de formaciones a trabajar ya en la defensa de la negociación colectiva sectorial.

Ha añadido que "la alternativa no es la negociación empresa por empresa", que en Euskadi "solo" afecta a 113.000 trabajadores y de ellos, 30.000 son de empresas de ámbitos estatal con centros de trabajo en la comunidad autónoma.

Arza ha defendido la negociación laboral en cada empresa si es desde la transparencia sobre la gestión de la compañía para lograr que la empresa "sea un proyecto compartido". Pero, ha añadido, "UGT-Euskadi no se va resignar a que más de 300.000 trabajadores no tengan reguladas sus relaciones laborales".

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Ha denunciado que los sindicatos estén sufriendo "ataques a su credibilidad y honorabilidad, sin parangón", con la finalidad de deslegilimarlos y restar peso a sus reclamaciones a favor de los derechos de los trabajadores. Frente a esos ataques, Arza ha defendido la labor de las centrales sindicales "como herramientas de resistencia y de proposición", "capaces de denunciar y de reivindicar, que propongan soluciones que eviten la involución democrática y que paren la creciente desigualdad social".

A su juicio, el mayor activo de los sindicatos es la credibilidad entre los trabajadores y por ello, su comportamiento "debe ser intachable". Según Arza, "UGT ha sido un ejemplo en la depuración de responsabilidades políticas y ha sido una de las pocas organizaciones donde se han presentado dimisiones", en relación con presuntas irregularidades respecto al cobre de subvenciones por cursos de formación. Ha opinado que el sindicato "es el más interesado" en que se aclaren "cuanto antes" esos desvíos.

Raúl Arza ha valorado la apuesta del Gobierno vasco sobre el mantenimiento del sistema de protección social que representa la Renta de Garantía de Ingresos. Ha reclamado un incremento de la presión fiscal para poder aumentar los ingresos de las entidades públicas y que se pueda garantizar el mantenimiento de servicios públicos como la sanidad y la educación.

Frente a reclamaciones políticas nacionalistas vascas "sobre la autodeterminación de los pueblos", Arza ha dicho que "lo más importante es la autodeterminación de las personas, su autonomía y su libertad, que pasa por tener un empleo seguro, bien remunerado y con derechos".

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