_
_
_
_
_
CRÍTICA | TEATRO
Análisis
Exposición didáctica de ideas, conjeturas o hipótesis, a partir de unos hechos de actualidad comprobados —no necesariamente del día— que se reflejan en el propio texto. Excluye los juicios de valor y se aproxima más al género de opinión, pero se diferencia de él en que no juzga ni pronostica, sino que sólo formula hipótesis, ofrece explicaciones argumentadas y pone en relación datos dispersos

Pushkin, a pie de página

El Nuevo Teatro de Riga presenta una versión de ‘Eugenio Oneguin’ divertida, didáctica y repleta de comentarios al margen

Javier Vallejo

En tiempos de Pushkin, algunas muchachas rusas ponían en el vino del chico deseado unas gotas de su sangre menstrual: si no fallaba el hechizo, pronto comenzarían un ciclo inacabable de embarazos y lactancias, para compensar la mortandad infantil, altísima incluso en las mejores familias. Como el agua se vinculaba con el cólera y la peste, solo se bañaban los dandis. En los teatros, el olor de multitudes era indescriptible, pero imaginable. El pelo tampoco se lavaba porque la grasa conservaba el peinado, y desmayarse era una manera de reiniciar el disco duro para la aristocracia oprimida por el corsé, a la que Eugenio Oneguin pertenecía.

En Oneguin, comentarios, el director letón Alvis Hermanis y su Jaunais Rīgas Teātris (Nuevo Teatro de Riga; "Onegin commentaries y New Riga Theatre", reza, colonialmente, el programa del Festival de Otoño a Primavera) hacen una versión de la novela en verso del gran poeta ruso divertida, didáctica, sintética y guarnida con un arsenal de notas a pie de página, extraídas de biógrafos y exégetas, pero también de manuales de costumbres decimonónicas. Como a Pushkin algún coetáneo le motejó ‘El Mono’ por su figura menuda, desgarbada y negroide (su bisabuelo, el general Abram Gannibal, africano nativo, fue educado por el zar Pedro I), Vilis Daudzins, su proteico intérprete, sale a escena con andares simiescos y trepa por las librerías de una escenografía hiperreal con agilidad que deja chica a la del Peter El Rojo de José Luis Gómez en su histórico montaje de Informe para una academia.

ONEGUIN, COMENTARIOS

A partir de la novela de Alexandr Pushkin. Intérpretes: Iveta Pole, Sandra Kļaviņa, Vilis Daudziņš, Kaspars Znotiņš, Ivars Krasts, Andris Keiŝs. Sonido y video: Gatis Builis. Infografía: Ineta Sipunova. Diseñador: Andris Freibergs. Director: Alvis Hermanis. Teatros del Canal. Del 14 al 16 de febrero.

Saltando de la ficción narrativa al relato biográfico, el apunte documental, la comedia y el drama, Hermanis establece correspondencias oportunas entre la vida de Pushkin y Eugenio Oneguin (Zaretski, padrino del duelo, está inspirado en Fiodor Tolstói, atrabiliario pariente del autor de Guerra y Paz, y la amistad del protagonista con Lenski tiene no poco de la que mantuvieron Pushkin y León Tolstói), A pesar del interés de las digresiones, y de la ironía con que se sirven, la interrupción continua de la acción dramática puede llegar a resultar un punto fastidiosa, pero al cabo, cuando Oneguin regresa del exilio, se reencuentra con Tatiana, queda desarbolado emocionalmente y Kaspars Znotiņš, su genial intérprete, relata en tercera persona lo sucedido sin dejar de encarnar mientras al personaje de manera radicalmente antinaturalista, sentimos que toda la novela está ahí, repentinamente y de un solo mazazo. Resulta sobresaliente como los actores se pasan el testigo de la narración, entran y vuelven a salir de sus personajes, crean clímax y los desvanecen para regresar al terreno del teatro documento. Llévense sus auriculares de bolsillo, porque los que la organización sirve para la traducción simultanea son manifiestamente mejorables.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Javier Vallejo
Crítico teatral de EL PAÍS. Escribió sobre artes escénicas en Tentaciones y EP3. Antes fue redactor de 'El Independiente' y 'El Público', donde ejerció la crítica teatral. Es licenciado en Psicología, en Interpretación por la RESAD y premio Paco Rabal de Periodismo Cultural. Ha comisariado para La Casa Encendida el ciclo ‘Mujeres a Pie de Guerra’.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_