_
_
_
_
_

El rechazo al cierre de aulas de infantil gana adhesiones en el PP

Novelda se suma a la marcha de las AMPA contra la propuesta de Educación

La propuesta de arreglo escolar o, dicho en otras palabras, el cierre de aulas de infantil que el departamento de María José Català pretende para el curso 2014-15, gana día a día rechazo no solo en la comunidad educativa y los grupos políticos de oposición, sino también en el propio Partido Popular. Ahora es el PP de Milagrosa Martínez, la expresidenta de las Cortes Valencianas y actual alcaldesa de Novelda, el que se suma a la marcha de protesta impulsada por las asociaciones de padres y madres de alumnos de la localidad contra la supresión de dos aulas de Educación Infantil.

La marcha prevista mañana sábado contra la eliminación de una unidad de 3 años en el colegio público Gómez Navarro y otra en el Alfonso X el Sabio cuenta con la adhesión del PP local, según lo ha hecho saber en un comunicado del concejal de Educación según el cual el equipo de gobierno municipal  "apoya y secunda la marcha".

El PP noveldense, dicen, estará "al lado de los padres, profesores y alumnos para que la voz de Novelda sea una sola voz ante los responsables de la Consejería". Como antecedentes se puede citar la abstención del PP de Xàbia en el pleno de diciembre ante una moción que reclamaba a la consejería que revocara la supresión de la unidad de infantil en un colegio público de la población, aprobada por los concejales de todos los demás grupos políticos.

Cabe recordar que el presidente del Consell, Alberto Fabra, negó el 3 de enero el cierre de unidades educativas  y optó por hablar de "reestructuración" de plazas escolares. 

No solo las AMPAs muestran su oposición a las supresiones, como -por citar un caso reciente- la del colegio Sector Aéreo de Valencia, que protagonizó este jueves una cacerolada de protesta. También los consejos escolares de numerosos municipios valencianos se oponen a la supresión de unidades de infantil, entre ellos los de las tres capitales de provincia. El temor latente en todos los casos, es el de que el cierre del aula de 3 años sea el principio del fin de una línea educativa: luego puede venir la de 4 años, luego la de 5 y así hasta el final, razonan.

En el caso de colegios de una sola línea, la preocupación es por el cierre futuro del centro. La Consejería de Educación se defiende argumentando que en conjunto se abren más unidades que se suprimen.  Y es cierto, pero eso no sucede en Infantil, donde pasa lo contrario, como han denunciado los sindicatos docentes, que llaman la atención, además, sobre el hecho de muchas unidades que se crean son habilitadas, es decir, provisionales por un año. La decisión definitiva sobre el arreglo escolar se producirá en marzo, tras el análisis de alegaciones. Hasta entonces, las protestas están servidas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_