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Adif no detalla ningún exceso de velocidad previo a la inauguración

Resume en seis folios el resultado de 324 viajes anteriores a la puesta en servicio

Santiago -

Desde el mismo día del accidente han sido varios los trabajadores de Renfe y Adif que, bajo la premisa del anonimato, aseguraron a diversos medios de comunicación que algún tren ya había circulado por la curva de Angrois a más velocidad de la permitida. Pero la instrucción del caso sigue sin tener constancia documental de ello y por tanto de si era previsible un accidente por exceso de velocidad.

 Tanto Adif como Renfe aseguraron que no se produjo ningún incidente en el año y medio que pasó desde la inauguración de la línea, el 10 de diciembre de 2011, hasta el día del accidente. Así que el juez Aláez, a petición del abogado de Garzón, preguntó por posibles problemas previos a la apertura de la línea. Adif ha respondido a esa petición asegurando que “no se elaboran actas ni certificados de pruebas para cada una de las circulaciones” sino “informes de las pruebas realizadas y sus conclusiones”. Pero lo que Adif ha remitido al juez no son esos “informes” y “conclusiones” originales sino solo un listado, con fecha del pasado 19 de diciembre, que en apenas seis páginas detalla las características de las 324 “circulaciones de pruebas” realizadas con varios tipos de tren entre el 4 de noviembre y el 6 de diciembre de 2011. Recorrieron 27.500 kilómetros, de los que solo 9.807 se hicieron con el sistema de control constante de velocidad, ERTMS, que luego dio problemas en los Alvia, en los que se desconectó.

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Adif despacha el resultado de cada viaje con una sola línea de información. En ella incluye datos como fecha, tipo de tren, horario, duración y kilómetros recorridos, así como un apartado de “observaciones” cuyo contenido se reduce a medida que aumenta el número de viajes y se acerca la inauguración. Entre esas “observaciones” abundan rebases no autorizados de señales, problemas de tracción y electrificación o retrasos debidos al personal, pero no menciones de un exceso de velocidad previo en el entorno de Angrois.

En el listado no se nombra, como pedía el juez, a las personas que iban a bordo de los trenes ni a los maquinistas “de Renfe, cuyos nombres no constan a Adif”, argumenta la empresa pública. Tampoco aparecen los viajes en ambos sentidos realizados la mañana del 2 de diciembre para mostrar la línea a los periodistas ocho días antes de su inauguración.

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