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Manolito Gafotas tendrá por fin su parque en Carabanchel Alto

La justicia da la razón al Ayuntamiento frente a los dueños del terreno y desbloquea el proyecto, que se iniciará a final de año

Terrenos en los que se ejecutará a partir de finales de año el parque Manolito Gafotas, en el distrito de Carabanchel.
Terrenos en los que se ejecutará a partir de finales de año el parque Manolito Gafotas, en el distrito de Carabanchel.

Los vecinos de Carabanchel Alto podrán solazarse a partir del año que viene en el parque de Manolito Gafotas, una zona verde que llevaban más de una década reclamando sin éxito y que estaba varada en los tribunales desde 2010.

El Ayuntamiento de Madrid ha ganado el litigio contra los propietarios de los terrenos del PAU de Carabanchel, que acabaron de construir los bloques de viviendas previstos sin ejecutar el parque incluido en el plan. Ya se está redactando el proyecto, y las obras echarán a andar a final de año, según fuentes municipales.

Manolito Gafotas nació de la pluma de Elvira Lindo en 1994, con ocho años de edad y vecino de Carabanchel Alto. En 2006, con Alberto Ruiz-Gallardón como alcalde, los vecinos de ese barrio del sur de Madrid (que en realidad se llama Buenavista, y tiene 36.000 habitantes) bautizaron informalmente con el nombre de este personaje infantil una franja de secarral de cuatro kilómetros de largo y alrededor de 100 metros de ancho, pegada a la M-40.

Esa área, junto a las calles de Los Morales y Atapuerca, está catalogada urbanísticamente como zona verde. Cuando se empezó a levantar el PAU de Carabanchel, en 1999, estaba previsto crear un parque forestal de 15 hectáreas.

Pero la Junta de Compensación (los propietarios de los terrenos) terminó de construir las viviendas en 2009 sin convertir ese solar de matojos en el parque prometido. Los únicos árboles que había eran los que plantaron los vecinos como acto reivindicativo.

El Ayuntamiento (que en un principio se había negado a bautizar el parque con el nombre del personaje literario, pero cedió ante la presión vecinal) inició en 2010 un procedimiento legal para usar los avales presentados como garantía por los propietarios para sufragar la ejecución del parque.

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El enfrentamiento judicial concluyó el pasado mes de noviembre, cuando un Juzgado de lo Contencioso Administrativo falló a favor del Ayuntamiento. Los trámites para incautarse del dinero correspondiente (el parque costará 609.000 euros) están “muy avanzados”, según fuentes municipales, que aseguran que se ha iniciado ya la redacción del proyecto del parque, y que las obras comenzarán a finales de año.

Según el proyecto municipal, el parque contará con un área estancial de aproximadamente una hectárea, ubicada en la intersección de las calles del Pinar de San José y de La Torta. Serán jardines con mobiliario urbano y zonas de juegos infantiles. El resto de la superficie se habilitará como zona forestal que sirva de pantalla entre las viviendas y la M-40, aunque podrá recorrerse a través de una senda. Está previsto plantar 3.600 árboles y 10.500 arbustos. Además, hay trazado un carril bici que será necesario remozar.

Los vecinos del barrio llevan desde 2003 reivindicando este parque, que fue proyectado en el Plan General de Ordenación Urbana de 1997 para blindar las viviendas de la contaminación y el ruido de la M-40. La asociación de vecinos de Carabanchel Alto denuncia que, en 2005, la M-45 “le arrebató un buen pedazo”.

Para evitar que siguiera menguando, desde 2003 han organizado un acto entre festivo y reivindicativo, la Arbolada, en el que, con ayuda de Ecologistas en Acción e IU, han plantado un centenar de árboles (pinos, arces, etcétera) en esos terrenos.

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